Tegucigalpa, Honduras
Los representantes del transporte de carga unitarios y una comisión del gobierno lograron anoche los primeros acuerdos que permiten suspender las acciones de protesta que mantenían desde el lunes anterior.
La posta de El Durazno, en la carretera al norte del país, fue el punto de encuentro entre los representantes del transporte con la comisión del gobierno.
“Acabamos de concluir una larga pero productiva reunión con los representantes del sector de transporte unitario de carga y se ha llegado a acuerdos en los puntos más importantes que ellos habían solicitado”, informó Roberto Ordóñez, integrante de la comisión
de gobierno.
Ratificó que “sí podemos adelantar que se han logrado acuerdos con el sector transporte y dentro de los compromisos está la suspensión del paro que ha venido ocurriendo en las últimas horas”.
En horas de la mañana, como si se tratara de una emergencia nacional, las estaciones gasolineras del país amanecieron abarrotadas de vehículos mientras los conductores estaban desesperados por cargar combustible.
Conos color naranja fueron colocados en varias bombas de las gasolineras debido a que no había producto para ofrecer a los clientes porque las cisternas cargadas estaban varadas en la protesta que mantenía ayer la dirigencia de este tipo de transporte.
Desde el lunes anterior comenzaron las acciones de los conductores de rastras y camiones exigiendo el respeto a la tarifa por flete acordada, que el equipo pesado de otro país no transporte carga nacional al interior de Honduras y que el precio por emisión de permisos de operación y explotación quede con base en la ley anterior, que son 200 lempiras.
Desde entonces, las unidades que transportan los carburantes a las 110 estaciones gasolineras de la capital se han mantenido paralizadas.
Juan Carlos Segovia, presidente de la Asociación Hondureña de Distribuidores de Productos del Petróleo (Ahdippe), advirtió la mañana de ayer que tenían combustible para 48 o 60 horas y de no solucionarse la problemática, se podría agudizar la escasez.
Pero en horas de la noche, Saraí Silva, directora ejecutiva de la misma organización, afirmó que alrededor del 50% de las gasolineras de la capital han quedado desabastecidas por la sobredemanda que se ha registrado en las últimas horas.
Se estima que en la capital se consumen 379,218 galones de combustible a diario y las estaciones gasolineras no tienen suficientes cisternas para almacenar reservas.
Algunas gasolineras informaron que se están abasteciendo para atender a sus clientes.
Las protestas se intensificaron ayer en los principales ejes carreteros del país y en las vías más transitadas de Tegucigalpa y Comayagüela.
En horas de la mañana se conformó una comisión por parte del gobierno para intentar darle solución al problema.
A la altura del kilómetro nueve, de la carretera CA-5 Norte, frente al cementerio Santa Cruz Memorial, los dirigentes de los conductores hicieron su punto de encuentro.
De allí no dejaban pasar los carros pesados, solo los que llevaban productos perecederos y se le dio vía libre a los vehículos livianos, buses y ambulancias.
Al mismo tiempo, exigieron a la comisión del gobierno que llegaran hasta ese punto, a negociar una salida a la crisis, porque no querían arreglos bajo la mesa.
Dirigentes de las organizaciones de transporte de carga que los habían representado en otras negociaciones llegaron hasta ese lugar, pero fueron corridos por los conductores porque no creen en ellos, aseguraron.
Propuesta
La comisión fue integrada por la comisionada presidenta del Instituto Hondureños de Transporte Terrestre (IHTT), Pyubani Williams; el ministro de Energía, Roberto Ordóñez; el viceministro de Seguridad, Luis Suazo y el titular de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco),
Lisandro Rosales.
También asistió Wendy Flores, directora de la Dirección Adjunta de Rentas Aduaneras (DARA); el viceministro de Transporte de la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos (Insep), Germán Rodríguez y el alto mando de la Policía Nacional y Militar.
Al mediodía, los funcionarios que integran la comisión llegaron hasta el punto donde se encontraban los transportistas, llevando en la mano una propuesta de siete puntos con la intención de reanudar el servicio de carga.
Según el IHTT, son más de 24,500 rastras nacionales que circulan en el país y la mayoría estaban detenidas en los principales ejes carreteros.
Williams leyó los siete puntos, pero los transportistas no aceptaron y pidieron a los funcionarios de una a dos horas para analizar el documento con sus apoderados legales.
Al cabo de las 5:30 de la tarde, los conductores de las unidades salieron con una contrapropuesta con 12 puntos, que fue presentada a la comisión del gobierno.
Estos puntos fueron: que se cumpliera la entrega de nuevos códigos aduaneros, el pago del 1.24 de dólar de tarifa por kilómetro recorrido y el 20% por remolque, bajar el precio a los permisos de explotación y operación, que solo los hondureños transporten carga a Panamá.
De igual forma que se habiliten las básculas en carreteras las 24 horas de día, que el 70 % de la carga la lleve el transporte unitario y el 30%, las empresas que
la generan.
Al mismo tiempo, pidieron que menores de 21 años opten a licencia pesada, que no exista limitación para las unidades antiguas ya registradas, gozar de las exoneraciones que tienen los otros sectores del mismo rubro, que el gobierno reconozca a sus nuevos dirigentes, que no haya represalias en su contra y que el Presidente firme en cadena nacional el acuerdo.
Los dos sectores se reunieron en la estación policial de El Durazno hasta las 10:00 de la noche aproximadamente, donde se informó que hubo humo blanco.
Entre las demandas estaba que el presidente Juan Orlando Hernández en cadena nacional anunciara los acuerdos, pero se hizo en conferencia de prensa desde Casa de Gobierno.
Para hoy se espera que las estaciones gasolineras sean abastecidas y todo vuelva a la normalidad.