Honduras

Trasladan a trece niños al Hospital del Niño Quemado

El nuevo hospital tiene capacidad para 40 pacientes y fue construido a un costo de 104 millones

08.09.2018

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Un total de 13 niños fueron trasladados el sábado del complejo del Materno Infantil al recién construido Hospital del Niño Quemado que funciona en los predios del Hospital María, donde continuarán recuperándose de sus lesiones provocadas con agua caliente o pólvora, entre las principales causas.

El traslado lo hicieron ambulancias de la Unidad de Emergencia de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Cuerpo de Bomberos y el Club de Mini Cooper con el apoyo de Tránsito y de la Policía Nacional.

Los niños, que provienen de todo el país, fueron conducidos con mucho cuidado, con las normas que regulan este tipo de operaciones y con el personal médico y de enfermería para atender cualquier eventualidad, al final todos llegaron bien a su destino.

En el Hospital del Niño Quemado serán atendidos en la Sala de Cirugía Plástica Pediátrica, que con estos casos comienza a operar siendo uno de los logros de este nuevo hospital que ayudará mucho a la población infantil víctima de quemaduras, según destacó un médico del hospital Materno Infantil.

El hospital habilitará la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátrica que contará, al igual que la Sala de Cirugía Plástica, con médicos especialistas.

El Hospital del Niño Quemado opera en un edificio de cuatro pisos y contará con un área de cuidados intensivos, sala de operaciones, sala de recuperación y tendrá capacidad para alojar 40 pacientes.

Tiene un costo de 104 millones de lempiras provenientes de fondos públicos que se complementa con un equipo médico valorado en 19 millones de lempiras que fue donados por el gobierno de Japón, informó Omar Mejía, presidente de la Fundación para el Niño Quemado.

“A los niños se les dará un tratamiento adecuado con especialistas que ya fueron contratados”, destacó Mejía, quien hizo un llamado a los padres de familia para que cuiden a sus niños porque las quemaduras son prevenibles, en su mayoría.