TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La inspección de los técnicos de la empresa proveedora del vehículo todoterreno tipo Black Mamba Sandcat -que se convirtió en chatarra luego de incendiarse- comenzó el jueves en total hermetismo y a puertas cerradas, por órdenes de la Secretaría de Seguridad.
En los predios de la Dirección Nacional de Fuerzas Especiales (DNFE) todo es secreto, mientras avanza la minuciosa revisión del millonario automotor que se dañó en la CA-5 a inmediaciones de Támara y que incluirá a los cinco Black Mamba restantes en el país de la flota de 10 adquirida hace tres meses por el gobierno.
El ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez, anunció el arribo al Aeropuerto Toncontín de un vuelo privado procedente de Monterrey, México, en el que fueron trasladados los técnicos de la empresa proveedora, para llevar a cabo las investigaciones del inexplicable incendio de la unidad.
Tras el inexplicable incidente, Sánchez instruyó detener las operaciones de los cinco vehículos blindados en el país hasta esperar la inspección del fabricante.
Mientras que equipos de investigadores del Cuerpo de Bomberos presentaron el informe preliminar sobre el incendio del automotor a las autoridades de la DNFE, sin que haya trascendido las causas que generaron el incendio del Black Mamba que quedó convertido en chatarra.
Hay más con fallas
Una fuente ligada a la Policía Nacional confió a EL HERALDO que “hay tres vehículos Black Mamba con fugas de aceite en el motor”.
Aunque se desconoce si estas fallas son de fábrica o por mal uso que se les da a los carros blindados valorados entre 10 y 13 millones de lempiras cada uno, Seguridad canceló a seis miembros de la institución policial: tres de Fuerzas Especiales y dos de la Dirección Nacional de Prevención y Seguridad Comunitaria (DNPSC) por descuido de vehículo Black Mamba Sandcat.
El reporte establece que “por descuido del personal policial agarró fuego y se incendió hasta el final, por lo cual se expulsaron de la institución por órdenes generales y se hará llegar los respectivos informes de retiro autorizado.
Este rotativo intentó buscar testimonio con algún agente involucrado, sin éxito.
Por otro lado, el ministro dio a conocer que la empresa proveedora “se ha comprometido a entregar a la Secretaría de Seguridad otra unidad completamente nueva y garantizada sin costo alguno, en reposición del vehículo que se quemó”, atribuyendo en sus declaraciones a fallas de fábrica.
¿Qué se sabe del siniestro?
El vehículo táctico retornaba el miércoles 15 de mayo de una misión programada para escoltar al extraditable, quien por orden judicial fue trasladado a la Penitenciaría Nacional en Támara.
El incidente ocurrió a pocos kilómetros de distancia del principal centro penal, y el fuego inició en la parte izquierda de donde va el motor, es decir en la parte frontal del conductor del pesado vehículo, donde los ocupantes resultaron ilesos.