Estos personajes pudieron haber dejado una huella positiva en el país, pero desviaron sus objetivos y fueron juzgados por la sociedad que no olvidará nunca su mal trabajo.
En este año serán recordados sin pena ni gloria, incluso algunos judicializados por su turbio actuar en momentos cuando Honduras necesitaba más de ellos.
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1. Juan Orlando Hernández
El presidente hondureño Juan Orlando Hernández está a pocos días de dejar el poder tras ocho años de presidencia, dejando una Honduras con algunos logros en seguridad y áreas puntuales, pero sumergida en una de las peores crisis de la historia, que va desde la corrupción en las estructuras del Estado, el narcotráfico infiltrado en las instituciones públicas, el abuso de poder, el autoritarismo hasta la carencia absoluta de los valores de la ética en la gestión pública.Hernández intentó hilvanar en su gestión de ocho años de gobierno (con una polémica y cuestionada reelección) una coherencia en los objetivos para allanar el camino de una Honduras próspera, pero en el fondo condujo a un país que hoy se debate con niveles estratosféricos y alarmantes de pobreza, una corrupción galopante en diferentes estratos de la estructura del Estado y unos niveles de autoritarismo preocupantes.
No en vano, el 28 de noviembre el pueblo hondureño le pasó la factura a la gestión de Hernández con un abismal rechazo al sufrir el Partido Nacional una catastrófica derrota, a pesar de llevar un candidato que le cambió la cara a la capital de Honduras.
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Además, la gestión de Hernández tampoco supo responder a los huracanes de Eta y Iota, que dejaron severos daños a la infraestructura, al aparato productivo y al frágil tejido social del país, al igual que a la pobre respuesta a la pandemia del covid-19 que evidenció una vez más no solo los tentáculos de la corrupción.
El covid-19 desnudó la carencia de políticas públicas y una estrategia adecuada en aspectos fundamentales como la salud, la educación y la economía del país. La gestión de Hernández Alvarado deja muchas deudas y lo lamentable es que son los hondureños los que padecen las consecuencias.
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2. Axel López
Uno de los mayores actos de corrupción en la historia de Honduras fue gestado por el guatemalteco Axel López, quien fue el protagonista de la estafa de los siete hospitales móviles vendidos a Honduras para atender la pandemia. A la fecha, apenas dos de las siete unidades funcionan para pacientes covid-19.Lo peor de todo es que López los promociona en ferias de la salud en Estados Unidos sin responder ante las autoridades nacionales a pesar de su orden de captura. Más de 1,147 millones de lempiras se desembolsó por la compra en unas estructuras inservibles para su fin original.
3. David Chávez
Declaraciones polémicas, involucramiento en supuestos actos de corrupción y un discurso donde se manejó que estaba en estado de ebriedad. Esas y más cosas le pasaron factura a David Chávez Madison para perder las elecciones por la alcaldía de Tegucigalpa ante Jorge Aldana. Eso también afectó a su partido ya que él es el presidente de la institución.4. Alba Consuelo Flores
Alba Consuelo Flores, una ministra de Salud sin tener un título o estudios relacionadas con el área de la salud. Fungió en el puesto con un total desconocimiento e improvisación y durante la pandemia demostró que el puesto le quedaba muy grande. A causa de la falta de formación, sus viceministros han tenido más protagonismo en el manejo del covid-19.5. Marco Bográn
Marco Bográn fue el artífice de la compra de los hospitales móviles. Al inicio defendió esta adquisición y dijo estar seguro que no era un fraude, al tiempo que sostuvo que se trataba de una empresa de prestigio en Turquía, cuando todo fue una cortina de humo de Axel López. Hoy, Bográn enfrenta un proceso judicial y en 2022 sería su juicio.6. Fabián Coito
Fabián Coito Machado tomó a la Selección Nacional en el 2019 y de cara a la eliminatoria hacia Qatar 2022 demostró no tener la capacidad para dirigir un combinado mayor, puesto que era su primera experiencia. Su falta de autocrítica y cambios permanentes entre partido también llevaron a que la Federación lo cesara de su cargo.+: Xiomara Castro, la candidata más votada de los once procesos electorales
7. Selección Nacional
Sumado al mal trabajo de Fabián Coito, la Selección Nacional ocupa uno de los puestos entre los villanos del 2021 por su eliminación tempranera al Mundial de Qatar 2022.Fue tanto el mal trabajo que la Bicolor dijo adiós incluso a la posibilidad del repechaje a falta de siete partidos para el final de la eliminatoria. La escuadra catracha no ha podido ganar ningún encuentro y cierra el año en el último lugar de la octagonal.
8. Santos Orellana
Una de las banderas que siempre pregonó el capitán Santos Rodríguez Orellana fue la de la lucha contra la corrupción, algo en lo que paradójicamente falló porque este año lo detuvieron por lavado de activos. El exmilitar supuestamente se quedaba con lo decomisado en operativos que se realizaban en Gracias a Dios e incluso habría participado en el asesinato a un informante de la DEA, según la acusación de la Fiscalía+: BCIE presentó cartera de proyectos al gobierno electo de Xiomara Castro
9. Arnaldo Bueso
Caso similar al de Alba Consuelo Flores, nombrado en un puesto sin haber estudiado sobre la rama. Arnaldo Bueso, ingeniero agrónomo, ha estado como ministro de Educación sin dejar resultados que el pueblo espera. Durante la pandemia hubo tiempo para mejorar los centros educativos de cara al regreso a clases, pero estos siguen en las mismas precarias condiciones, además, muchos niños no tenían condiciones para recibir clases en línea.10. Partidos minoritarios
Un claro ejemplo de negocio y no tanto de democracia es el de los partidos políticos minoritarios que no recibieron ninguna representación a nivel nacional.Los analistas consideran que son creados con el único objetivo de recibir un pago mediante la deuda política que entrega una cierta cantidad de dinero proporcional al número de votos que obtenga la institución. Muchos pueden desaparecer y demostrar que no necesariamente tener más partidos es igual a más democracia.