Exportar a Estados Unidos es el sueño de muchos productores hondureños que no saben cómo dar el primer paso.
Y en el otro lado de la moneda están muchos fabricantes, industriales o emprendedores nacionales que ni siquiera consideran la posibilidad de vender en Estados Unidos ya que desconocen que hay un mercado para sus productos.
Es en ese marco de referencia que surgió Catrachos abriendo mercados, una iniciativa para brindar asesoría gratuita a pequeños y medianos empresarios que aspiran vender sus productos en el mercado norteamericano.
Compromiso
Catrachos abriendo mercados nació del espíritu solidario de un grupo de hondureños deseosos de impulsar a potenciales exportadores que sueñan con extender su negocio en Estados Unidos.
Alexandra Hidalgo, Irwing Guardado, Jeanine Padilla y Eucebio Acosta, con la colaboración de otros colegas en Estados Unidos, son los integrantes del grupo cuya visión es la de abrir mercados que muchos hondureños no se han imaginado.
Aunque la educación es clave para alcanzar el progreso, la oportunidad que ofrece este grupo de hondureños a través de su asistencia gratuita para formar las conexiones que permitan enviar productos nacionales a un mercado diferente puede marcar la diferencia.
Catrachos abriendo mercados ofrece asesoría para el mercadeo y la publicidad, apoyo a la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Mipymes), la conformación de empresas asociativas y hasta la promoción de los productos en Estados Unidos.
Cuentan con la colaboración de Mauricio Midence, un motivador un excelente orador de la autoayuda y la superación.
Este compromiso para ayudar a emprendedores se trasluce en la frase de su página oficial de Facebook: 'Somos un nuevo modelo social, que piensa diferente'.
Catrachos abriendo mercados surgió en tiempos oscuros, el 28 de junio del 2009, cuando Honduras entró en una crisis política sin precedentes, como la propuesta de un movimiento impulsador y solidario para que muchos compatriotas salgan adelante.
Y si el idioma es una barrera, el grupo ofrece ayuda como intérprete entre los empresarios que sueñan con exportar y los posibles compradores, explica Alexandra Hidalgo, quien radica en San Pedro Sula y es una de sus fundadoras.
Para el caso, explica que si los dueños de una empresa que elabora rosquillas quieren venderlas en el mercado anglosajón, y si el producto reúne los estándares de exportación, ellos les sugieren que busquen tiendas en los estados con mayor concentración de hondureños.
Además, les proporcionan una lista de direcciones en internet donde pueden anunciar el producto que desean vender en el extranjero.
Producto nostálgico
A través de la hipótesis de una investigación, Catrachos abriendo mercados logró identificar una oportunidad de exportación para los productores hondureños.
La investigación planteaba: 'Consideramos que el 60% de los/las Hondureñas/os en estado de Florida, EE UU, estarían dispuestos a comprar el producto nostálgico que sea producido en su comunidad de origen en Honduras'.
Las crujientes tajaditas de platano, las infaltables rosquillas, las populares semitas, los exquisitos tamales, las incomparables espumillas y los tradicionales dulces, entre otros, son parte de 'todo lo que añoras cuando no vives en Honduras', dice Hidalgo.
El café y los lácteos también son productos apetecidos, pero su ingreso es más difícil porque requieren permisos sanitarios y tienen que cumplir con varias regulaciones.
Para vender en Estados Unidos hay que ofrecer productos competitivos, reflexiona Hidalgo.
Recuerda el caso de una emprendedora que quiso vender en EE UU tarjetas ecológicas y se encontró con que exportar la materia prima era caro y debía competir también con productos similares provenientes de la India que se vendían a menor precio.
Los artículos elaborados en China también representan una competencia desleal porque se venden más baratos, debido a que se exportan masivamente, añadió.
Vender en Estados Unidos 'es un proceso de disciplina que sólo lo he visto cuando hay compromiso, consistencia, fe, intuicion y, sobre todo y muy importante, las conexiones', aseguró Hidalgo.
Además de los posibles mercados, también se necesitan 'copilotos' que trabajen con estos emprendedores para que puedan preparar sus productos con los estándares más altos para poder ser consumidos en el exterior.
Empresas asociativas y Mipymes
Eucebio Acosta, otro colaborador de Catrachos abriendo mercados, comentó a ElHeraldo.hn que están trabajando para que las Mipymes puedan convertirse en empresas asociativas, con más oportunidades de crecimiento y rentabilidad.
Las empresas asociativas se conforman con varios personas que se dedican al mismo rubro, que se unen con el mismo capital, las mismas responsabilidades y ganancias.
Es decir que se constituyen en empresas de sociedad de responsabilidad limitada, una empresa como culaquier otro, pero con la facilidad de que el monto para constituirse puede ser de mil 600 lempiras y lo pueden conformar diez personas.
Es ese sentido, Acosta dijo que hay dos empresas asociativas que trabajan en la confección de ropa y tienen proyectada otra dedicada a la comercialización de frutas y vegetales.
Hasta la fecha se han conformado 20 empresas y esperan que al final del 2013 se organicen unas 500, que recibiran asesorías para mejorar la calidad de los productos para aumentar la posibilidad de exportarlos.
Otro de los planes que tienen para este año es el de crear la Asociación hondureña de Mipymes.
Explicó que han logrado apoyo del Banco Nacional de Desarrollo Agrícola (Banadesa), que ofrece préstamos de diez mil a 100 mil lempiras, al siete por ciento de interés.
Además se ha logrado sacar a unos 100 mil empresarios que estaban en la Central de Información Crediticia de la Comisión Nacional de Banca y Seguros (CNBS), pero esperan su reglamentación para poder aplicarla.
Seguir soñando
Para Alexandra Hidalgo es importante brindar asesoría a los comerciantes, que se les pueda ayudar incluso cuando hay frustraciones en medio del trabajo y que entiendan que está bien empezar de nuevo. En otras palabras, ante las frustaciones pueden 'seguir soñando'.
Aunque aún no cuentan con una página oficial, que es uno de sus proyectos para este año, las personas interesadas en obtener asesoría pueden contactar a estos hondureños colaboradores a través de Facebook.
También pueden comunicarse con Alexandra Hidalgo al teléfono celular 32820004. Sin duda, ella orientará a los hondureños que se atreven a soñar con abrir nuevos mercados.