El hecho se registro el pasado fin de semana, cuando una Patrulla Fronteriza del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) detuvo y deportó a la mujer identificada como Maily Anahí Vázquez Martínez, de ocho meses de gestación, junto a su esposo Cristhian Noel Pérez Aguilar y su hijo de dos años.
Los hondureños argumentaron que tras la detención, Maily comenzó a sentirse mal de salud por lo que acudieron a los agentes sin solución alguna.
'Les contamos a los agentes de migración que mi esposa se sentía mal, estuvimos entre cuatro y cinco horas detenidos, solo nos tomaron huellas digitales y fotos', explicó Pérez Aguilar, el esposo de la víctima.
Asimismo, Pérez Aguilar, de 26 años, contó que rogó a los uniformados para que revisaran la salud de su esposa y mientras ella se retorcía del dolor en una silla, ellos hicieron caso omiso. 'Los estadounidenses nos negaron la atención', narró.
LEA: Condenan a hondureño por transportar a personas ilegales en la frontera de EEUU
Tragedia
Tras ser deportados, los catrachos fueron trasladados al albergue Casa Migrante Divina Providencia, en San Luis Río Colorado, México.El sábado Maily Anahí decidió descansar, pero el domingo despertó con fuertes dolores, por lo que fue trasladada al Hospital General de San Luis, donde los médicos descubrieron que los dos bebés, de aproximadamente ocho meses y medio de gestación, llevaban más de 24 horas muertos en el vientre de la madre que tenía dos condiciones de riesgo: un embarazo múltiple e insuficiencia placentaria.
LEA: Hondureña narra el terror que vivió durante el derrumbe de edificio en Miami
Dura travesía
La pareja de hondureños emprendió su viaje hacia Estados Unidos en enero de 2021 y hasta este séptimo mes que estaban próximos a su destino final, sus sueños fueron apagados en cuestión de segundos al ser detenidos por las autoridades migratorias y al perder a sus dos hijos gemelos.La violencia y pobreza que vivían en Honduras fue la principal razón que los motivó a migrar al extranjero con la intención de encontrar un nuevo y provechoso futuro.
'Salimos de Honduras por obligación, o nos quedábamos a morir en nuestro país de hambre o por la violencia o migrábamos. Hoy siento que hemos perdido demasiado, apenas pude tener a mis hijos Derek y John Patrick por cinco minutos en mis brazos, los tuvimos que incinerar', agregó Pérez Aguilar.
ES DE INTERÉS: Unos 163 millones de lempiras ha recibido el INM por multar a migrantes irregulares
Por su parte, María de la Paz Cortés, abogada y representante legal de los hondureños, explicó que ya se están haciendo las investigaciones necesarias para proceder legalmente contra los responsables de acción u omisión del hecho.
'No es común que la Patrulla Fronteriza actúe de esta manera, de hecho ocurren casos de deshidratación o lesiones en migrantes y son llevados a recibir atención médica, pero esto no depende de las instituciones, sino de la manera como cada agente de migración ejerce su función pública', añadió.
Mientras tanto, los catrachos no toman volver a Honduras como una opción y prefieren buscar un empleo temporal en México para luego seguir intentando cruzar a Estados Unidos. Lo anterior, debido a que volver a la nación cinco estrellas es una 'sentencia de muerte' para ellos.
Hasta el momento, la Patrulla Fronteriza del Sector de Yuma no ha emitido un posicionamiento público respecto a este hecho a través de sus redes sociales oficiales, ni en su sitio de Internet, que son sus canales de información.
VEA: Joven hondureña da a luz en un baño del aeropuerto de Miami, Florida
