TEGUCIGALPA, HONDURAS
Una hondureña vivió uno de los momentos más terribles de su vida mientras estuvo recluida, en 2014, en un centro familiar del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE por sus siglas en inglés).
La joven mujer, que decidió no identificarse, reveló a Univision los abusos que sufrió del agente Daniel Sharky cuando estuvo recluida junto a su hijo.
La catracha relató entre lágrimas que Sharky la siguió al baño y una vez que ingresaron le quitó la ropa y comenzó a tocarla.
La madre soltera contó que él la amenazaba con que tenía el control de las cámaras del centro de detención.
Asimismo, confesó que el agente 'compraba' a su niño al llevarle juguetes, ropa o cualquier cosa que no pudiera tener, mientras estuviera recluido con su madre.
Los acosos continuaron hasta que un día, el guardia la metió al baño y cuando estaba por abusar de ella entró una niña y él salió del lugar.
'Ella vio lo que estaba pasando', comentó, mientras lloraba al recordar los peores siete meses que vivió antes de que pudiera quedar en libertad.
Daniel Sharky acusó a la hondureña con su supervisor por 'coqueta'.
Tiempo después, el exagente ICE reveló: 'Yo sí sentía sentimientos por ella, ella me gustaba, mi hogar no estaba tan bien, así que era bonito tener a alguien que me diera atención'.
Sharky fue despedido y acusado por asalto sexual, recibió una condena de tres meses de prisión por lo que había hecho con la catracha.
Una hondureña vivió uno de los momentos más terribles de su vida mientras estuvo recluida, en 2014, en un centro familiar del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE por sus siglas en inglés).
La joven mujer, que decidió no identificarse, reveló a Univision los abusos que sufrió del agente Daniel Sharky cuando estuvo recluida junto a su hijo.
La catracha relató entre lágrimas que Sharky la siguió al baño y una vez que ingresaron le quitó la ropa y comenzó a tocarla.
La madre soltera contó que él la amenazaba con que tenía el control de las cámaras del centro de detención.
Asimismo, confesó que el agente 'compraba' a su niño al llevarle juguetes, ropa o cualquier cosa que no pudiera tener, mientras estuviera recluido con su madre.
Los acosos continuaron hasta que un día, el guardia la metió al baño y cuando estaba por abusar de ella entró una niña y él salió del lugar.
'Ella vio lo que estaba pasando', comentó, mientras lloraba al recordar los peores siete meses que vivió antes de que pudiera quedar en libertad.
Daniel Sharky acusó a la hondureña con su supervisor por 'coqueta'.
Tiempo después, el exagente ICE reveló: 'Yo sí sentía sentimientos por ella, ella me gustaba, mi hogar no estaba tan bien, así que era bonito tener a alguien que me diera atención'.
Sharky fue despedido y acusado por asalto sexual, recibió una condena de tres meses de prisión por lo que había hecho con la catracha.