IOWA, ESTADOS UNIDOS.-Un hondureño que había
desaparecido hace casi una década, y tras haber sido buscado por largo tiempo en todos lados, finalmente este martes fue confirmado que murió detrás de un
refrigerador del supermercado donde trabajaba.
El cuerpo de Larry Ely Murillo Moncada estaba detrás del refrigerador de la tienda donde antes había sido empleado. Fueron los trabajadores del antiguo supermercado en Iowa quienes encontraron la macabra escena, cuando retiraban unas estanterías y refrigeradores.
El compatriota hondureño fue reportado como desaparecido el 28 de noviembre de 2009, después de que salió corriendo de su casa tras una discusión.
La identidad de Larry Murillo Moncada fue confirmada mediante ADN.
La hipótesis de su muerte
Se cree que el hondureño fue al supermercado para refugiarse sobre uno de los refrigeradores industriales, un lugar común entre los empleados cuando querían esconderse.
Los investigadores piensan que resbaló y cayó en una brecha de 45 centímetros, entre la pared y la parte trasera del enfriador, donde quedó atrapado y con tan mala suerte que por el sonido de los compresores nadie lo escuchó pedir auxilio.
En la autopsia no se encontraron señales de golpes o abuso, así que se concluyó que se trató de una muerte accidental.
Las autoridades confirmaron finalmente este martes la identidad del hondureño mediante cotejamiento del ADN del cadáver con el de los padres de Murillo Moncada.
El cuerpo de Larry Ely Murillo Moncada estaba detrás del refrigerador de la tienda donde antes había sido empleado. Fueron los trabajadores del antiguo supermercado en Iowa quienes encontraron la macabra escena, cuando retiraban unas estanterías y refrigeradores.
El compatriota hondureño fue reportado como desaparecido el 28 de noviembre de 2009, después de que salió corriendo de su casa tras una discusión.
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El día que desapareció
Cuando desapareció las autoridades contactaron a los familiares del hondureño y además al Control de Aduanas de los Estados Unidos, ya que Murillo Moncada había sido notificado para ser deportado a Honduras.
Sin embargo, no dieron con el paradero del hombre. Al parecer, Murillo Moncada estaba tomando medicamentos que lo hacían perder el control, señaló la policía.
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La hipótesis de su muerte
Se cree que el hondureño fue al supermercado para refugiarse sobre uno de los refrigeradores industriales, un lugar común entre los empleados cuando querían esconderse.
Los investigadores piensan que resbaló y cayó en una brecha de 45 centímetros, entre la pared y la parte trasera del enfriador, donde quedó atrapado y con tan mala suerte que por el sonido de los compresores nadie lo escuchó pedir auxilio.
En la autopsia no se encontraron señales de golpes o abuso, así que se concluyó que se trató de una muerte accidental.
Las autoridades confirmaron finalmente este martes la identidad del hondureño mediante cotejamiento del ADN del cadáver con el de los padres de Murillo Moncada.
