El Altar, Sonora, México, es un pueblo rodeado por el famoso y peligroso desierto de Sonora; los más de 10 mil habitantes de esta localidad saben que esa ruta es utilizada por los migrantes.
El límite entre el desierto y esta zona son seis cruces en memoria de miles de migrantes que han muerto en el desierto. Después de eso, son 96 kilómetros de arena dominados por grupos 'que controlan el paso de personas', según reveló el medio mexicano Animal Político.
El Sásabe es el límite entre México y Estados Unidos. Esta población conduce al desierto de Arizona, donde desde 2001 hasta la fecha la morgue de Tucson ha recuperado 2,500 cadáveres.
Las autoridades forenses indicaron que solo un porcentaje mínimo pertenece a migrantes que pierden la vida en el desierto, la mayoría hondureños.
VEA TAMBIÉN: 427 mil catrachos han sido detenidos en frontera de Estados Unidos
“Hemos notado esa compleja situación de que migrantes procedentes de esa zona utilizan esa ruta desde Honduras rumbo a Sonora. Es una migración que hemos notado desde hace cinco y siete años”, dijo Rubén Figueroa, integrante del Movimiento Migrante Mesoamericano a Animal Político.
Figueroa detalló que la mayoría de hondureños migran de la zona norte del país debido a la pobreza. Los compatriotas viajan sin un coyote, lo que significa que al cruzar el desierto se ven obligados a cargar una mochila con droga a cambio de ser transportados a Estados Unidos.
Al llegar a Sásabe los migrantes se quedan en casas abandonadas que tienen dibujos o historias en sus paredes, mientras esperan la orden de seguir su camino.
A lo largo del desierto se encuentran zapatos, restos de ropas y hasta mochilas.
Muchos de los migrantes que cruzan esta peligrosa ruta no pueden lograr llegar a la frontera y sus cuerpos quedan en medio del desierto.
LEA: Dos migrantes hondureños tienen un mes de estar secuestrados en México
Entre 2017 y 2019 el Comité de Familiares de Migrantes Desaparecidos Amor y Fe ha identificado a cinco personas que fueron halladas muertas. A esto se suman 10 casos de personas halladas con vida.
La organización estima que por cada migrante reportado como desaparecido hay tres casos que no son informados.
La Secretaría de Gobernación de México estima que cada año ingresan 150 mil migrantes a ese país, al menos desde 2018 cuando salió la primera caravana migrante desde Honduras.
