La víctima, identificada como Juan Luis Gavarrete Romero (46), era padre de dos niños menores de cinco años, quienes quedaron huérfanos luego de la tragedia que sus familiares aún no logran explicar.
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Según se conoció, horas antes de su muerte, el hondureño se detuvo en una gasolinera localizada en Roanoke, con el objetivo de descansar antes de continuar su camino de regreso hacia Carolina del Norte, donde le esperaba su familia.
Tras sentirse cansado por el largo viaje, Gavarrete Romero decidió tomar una pausa y dormir por un instante; sin embargo, al percatarse de su acción, el encargado del establecimiento llamó a la policía que posteriomente le dio detención y bajo custodia policial el compatriota fue reportado muerto.
Al día siguiente, parientes del ahora fallecido acudieron a la estación de venta de combustibles, pero una vez ahí les informaron que los agentes policiales se habían llevado las grabaciones del momento en que todo ocurrió.
Por su parte, las autoridades sostuvieron que el hombre fue encontrado muerto en su celda, producto de un paro cardíaco.
No obstante, sus familiares dejaron entrever que no aceptarán esta versión ya que -por ahora- el Departamento de Policía del Condado de Roanoke no ha revelado las imágenes que detallan cuándo y cómo se originó su aprehensión.
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