CHIANG RAI, TAILANDIA
Las autoridades difundieron este miércoles las primeras imágenes en el hospital de los niños rescatados de una cueva en Tailandia, donde aparecen sentados en sus camas con máscaras en la cara y saludando a la cámara.
Este mismo miércoles otro video publicado por la marina tailandesa en Facebook muestra imágenes del rescate, donde se ven a algunos de los niños en camillas y vestidos con equipos de buceo. También aparecen buzos tailandeses y extranjeros usando poleas, cuerdas y tubos de goma para sacarlos de la red subterránea.
Los socorristas, aguerridos buzos extranjeros ayudados por comandos de la marina tailandesa, fueron celebrados como héroes por haber sacado a los niños de la gruta de Tham Luang, en el norte de Tailandia, donde quedaron atrapados el 23 de junio por la crecida de las aguas en su interior.
Los chicos, de 11 a 16 años, y su entrenador, de 25, fueron extraídos en tres días. El último grupo fue sacado a la superficie el martes por la noche.
La exclamación 'Hooyah', heredada de la marina estadounidense y que tiene como objetivo levantar los ánimos, proliferaba en las redes sociales tailandesas. '¡Misión cumplida!', se congratulaba este miércoles el diario The Nation.
Durante 18 días, Tailandia y el resto del planeta siguieron con el alma en vilo la odisea del joven equipo de fútbol, llamado Jabalíes Salvajes. Las nuevas lluvias que se abatieron en esta región limítrofe con Birmania y Laos hicieron más urgente aún la intervención.
Los jóvenes futbolistas pasaron nueve días en las entrañas de la gruta, hasta que dos buzos británicos lograron llegar hasta ellos, a principios de la semana pasada. Exhaustos pero vivos, se habían colocado en un promontorio, a más de cuatro kilómetros de la entrada de la amplia red subterránea.
Entonces los socorristas estudiaron desesperadamente todas las soluciones posibles, como perforar túneles en la montaña, o hacerles esperar bajo tierra, durante semanas, hasta que terminara la temporada de los monzones.
Todo por el todo
Pero ante la amenaza de nuevas lluvias y el descenso del los niveles de oxígeno en la cámara donde el grupo había hallado refugio, las autoridades decidieron el domingo intentar el todo por el todo. El recorrido estaba sembrado de obstáculos, y era necesario bucear en túneles inundados y en estrechos pasos.
Trece buzos extranjeros y los comandos tailandeses extrajeron a los niños en tres grupos. Cada salida era saludada con la exclamación 'Hooyah' en la página Facebook de la marina tailandesa.
Este término se convirtió rápidamente en hashtag, invadiendo las redes sociales, en las que se inmiscuyeron personajes de la política, del deporte o del mundo de los negocios para expresar su felicitación y mejores deseos a los niños y a los socorristas.
Los niños han sido puestos en cuarentena en el hospital de Chiang Rai. Pese a todo, están en buen estado físico y mental, según indicaron las autoridades al referirse a los primeros rescatados.
Centenares de colegiales se congregaron este miércoles frente al hospital donde aún permanecerán varias semanas los rescatados de la gruta.
Dirigidos por un profesor, los alumnos cantaban para agradecer 'a todos aquellos que contribuyeron al éxito de la misión'
Las autoridades mantienen en secreto los detalles precisos de esta misión, que le costó la vida a un antiguo comando de la marina tailandesa. Como prueba de la dificultad de la operación, el buzo murió asfixiado cuando intentaba salir de la gruta.
Las autoridades difundieron este miércoles las primeras imágenes en el hospital de los niños rescatados de una cueva en Tailandia, donde aparecen sentados en sus camas con máscaras en la cara y saludando a la cámara.
Este mismo miércoles otro video publicado por la marina tailandesa en Facebook muestra imágenes del rescate, donde se ven a algunos de los niños en camillas y vestidos con equipos de buceo. También aparecen buzos tailandeses y extranjeros usando poleas, cuerdas y tubos de goma para sacarlos de la red subterránea.
Los socorristas, aguerridos buzos extranjeros ayudados por comandos de la marina tailandesa, fueron celebrados como héroes por haber sacado a los niños de la gruta de Tham Luang, en el norte de Tailandia, donde quedaron atrapados el 23 de junio por la crecida de las aguas en su interior.
Los chicos, de 11 a 16 años, y su entrenador, de 25, fueron extraídos en tres días. El último grupo fue sacado a la superficie el martes por la noche.
La exclamación 'Hooyah', heredada de la marina estadounidense y que tiene como objetivo levantar los ánimos, proliferaba en las redes sociales tailandesas. '¡Misión cumplida!', se congratulaba este miércoles el diario The Nation.
Durante 18 días, Tailandia y el resto del planeta siguieron con el alma en vilo la odisea del joven equipo de fútbol, llamado Jabalíes Salvajes. Las nuevas lluvias que se abatieron en esta región limítrofe con Birmania y Laos hicieron más urgente aún la intervención.
Los jóvenes futbolistas pasaron nueve días en las entrañas de la gruta, hasta que dos buzos británicos lograron llegar hasta ellos, a principios de la semana pasada. Exhaustos pero vivos, se habían colocado en un promontorio, a más de cuatro kilómetros de la entrada de la amplia red subterránea.
Entonces los socorristas estudiaron desesperadamente todas las soluciones posibles, como perforar túneles en la montaña, o hacerles esperar bajo tierra, durante semanas, hasta que terminara la temporada de los monzones.
Todo por el todo
Pero ante la amenaza de nuevas lluvias y el descenso del los niveles de oxígeno en la cámara donde el grupo había hallado refugio, las autoridades decidieron el domingo intentar el todo por el todo. El recorrido estaba sembrado de obstáculos, y era necesario bucear en túneles inundados y en estrechos pasos.
Trece buzos extranjeros y los comandos tailandeses extrajeron a los niños en tres grupos. Cada salida era saludada con la exclamación 'Hooyah' en la página Facebook de la marina tailandesa.
Este término se convirtió rápidamente en hashtag, invadiendo las redes sociales, en las que se inmiscuyeron personajes de la política, del deporte o del mundo de los negocios para expresar su felicitación y mejores deseos a los niños y a los socorristas.
Los niños han sido puestos en cuarentena en el hospital de Chiang Rai. Pese a todo, están en buen estado físico y mental, según indicaron las autoridades al referirse a los primeros rescatados.
Centenares de colegiales se congregaron este miércoles frente al hospital donde aún permanecerán varias semanas los rescatados de la gruta.
Dirigidos por un profesor, los alumnos cantaban para agradecer 'a todos aquellos que contribuyeron al éxito de la misión'
Las autoridades mantienen en secreto los detalles precisos de esta misión, que le costó la vida a un antiguo comando de la marina tailandesa. Como prueba de la dificultad de la operación, el buzo murió asfixiado cuando intentaba salir de la gruta.