El ministerio de Defensa confirmó que se trató de una 'acción terrorista', una de las más graves que ha sacudido a la capital colombiana desde que disminuyó la intensidad del conflicto armado por cuenta del pacto de paz con la exguerrilla FARC a finales de 2016.
El ataque fue dirigido contra la Escuela de Oficiales General Francisco de Paula Santander, y 'hasta el momento deja 8 personas muertas y 10 heridos', señaló el organismo en un comunicado.
A raíz de ello, el presidente Iván Duque canceló un consejo de seguridad en Quibdó, en el noroeste del país, y está de regreso a la ciudad junto a la cúpula militar.
'Todos los Colombianos rechazamos el terrorismo y estamos unidos para enfrentarlo. COLOMBIA se entristece pero no se doblega ante la violencia', escribió el mandatario en Twitter.
Duque, quien asumió el poder en agosto de 2018, ha endurecido la política antidrogas en el país con mayor producción de cocaína en el mundo, y ha fijado condiciones para reactivar los diálogos de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), última guerrilla reconocida en el país.
Ingreso abrupto
Las primeras imágenes de la televisión local mostraron el movimiento de ambulancias alrededor del sitio del presunto ataque, y lo que parecen ser los restos de un vehículo en llamas.
Una funcionaria de salud de las Fuerzas Militares señaló a la prensa que al parecer el vehículo irrumpió 'abruptamente' en la sede policial.
'Entró abruptamente, casi atropellando a los policías y enseguida fue la explosión', comentó Fanny Contreras.
Según su versión, 'hubo otra pequeña explosión', aunque de momento las autoridades de la capital manejan la hipótesis de un solo estallido.
'He dado órdenes a la Fuerza Pública para determinar los autores de este ataque y llevarlos a la justicia', agregó Duque.
Con unos ocho millones de habitantes, Bogotá había sido sacudido por esporádicas acciones de terror en 2017.
En febrero de ese año, el ELN se adjudicó un atentado contra una patrulla policial que dejó un uniformado muerto y varios heridos de gravedad en el barrio la Macarena de Bogotá.
Ese mismo año, un atentado en un centro comercial de Bogotá dejó tres muertos y varios heridos. Las autoridades culparon del hecho al Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP), un grupusculo de izquierda.