Y la situación podría empeorar para los trabajadores del sector público, usualmente una parte estable de la economía estadounidense.
Los gobiernos intentan balancear sus presupuestos para un año fiscal que comienza el 1 de julio, pero esperan que los impuestos caigan 20% o más en muchos lugares.
LEA: Alcaldesa de Washington pinta calle con lema 'Black Lives Matter
Eso significa que los recortes temporales para sobrevivir el próximo mes se podrían convertir en permanentes y afectar a todo, desde escuelas hasta la recolección de basura.
Los sindicatos y grupos bipartidistas presionan para que el Congreso envíe más ayuda rápidamente a los gobierno estatales y municipales. Tras un paquete de ayuda de 2,2 billones de dólares aprobado en marzo, la Cámara de Representantes con mayoría demócrata aprobó un paquete adicional de tres billones de dólares, que incluye un billón para los gobiernos.
Sin embargo, el líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell, dijo que su cámara no acordará una cantidad tan grande —o nada rápidamente— conforme se reactiva la economía.
ADEMÁS: Muerte de George Floyd, un drama que no es exclusivo de EEUU