SAN FRANCISCO, ESTADOS UNIDOS. -Un juez repitió el martes las palabras soeces que el presidente
Donald Trump utilizó para describir a algunos países de
África, y cuestionó los motivos de su gobierno para poner fin a un programa que permite que inmigrantes de
Sudán, Nicaragua, Haití y El Salvador vivan y trabajen de forma legal en
Estados Unidos.
Durante una audiencia respecto a una demanda que busca restituir el programa, el juez Edward Chen también refirió un memorándum que, dijo, indicaba que la decisión de terminar con el programa fue motivada por la política del gobierno de poner a “Estados Unidos Primero”. Pidió a un abogado del Departamento de Justicia que respondiera a las acusaciones de los demandantes de que dicha política estaba dirigida a excluir a los inmigrantes que no son blancos.
Chen decidirá si emite una orden preliminar para bloquear la decisión del gobierno de poner fin al Estatus de Protección Temporal (TPS por sus siglas en inglés) para los ciudadanos de las cuatro naciones mencionadas. No indicó cuándo emitiría el fallo.
El TPS se otorga a países devastados por desastres naturales o guerras. Permite que los ciudadanos de aquellos países vivan en Estados Unidos hasta que mejore la situación en su tierra natal.
La querella alega que la decisión del gobierno estuvo motivada por cuestiones racistas y pone como ejemplo la referencia soez de Trump para los países de África realizada durante una reunión sobre inmigración en la Casa Blanca en enero.
“Tenemos declaraciones discriminatorias descaradas provenientes de la persona más poderosa del gobierno”, dijo Ahilan Arulanantham, abogado de la Unión Americana de Libertades Civiles del sur de California, en la audiencia . Arulanantham representa a los demandantes.
Adam Kirschner, abogado del Departamento de Justicia, dijo que el memorándum que Chen refirió mostraba lo que la entonces secretaria interina de Seguridad Nacional , Elaine Duke, estaba pensando hacer sobre el TPS. Kirschner dijo que se esperaba la contribución de la Casa Blanca sobre un tema como ese, pero que la decisión final fue tomada por Duke.
Chen repitió el comentario soez de Trump sobre los países africanos cuando respondió que cualquier influencia que la Casa Blanca tuvo sobre Duke podría ser relevante.
Los salvadoreños recibieron TPS en 2001 tras un sismo, y el estatus se ha renovado en repetidas ocasiones. El gobierno de Trump anunció en enero que el TPS expiraría para el país centroamericano en septiembre de 2019.
El gobierno federal concluyó que El Salvador había recibido mucha ayuda internacional para recuperarse del sismo y que las casas, escuelas y hospitales habían sido reconstruidos.
En cuanto a los otros tres países, el gobierno de Trump también puso fin al TPS.
Más de 200,000 inmigrantes podrían enfrentar un proceso de deportación por el término del TPS y tienen más de 200,000 hijos con ciudadanía estadounidense que corren el riesgo de ser desarraigados de sus comunidades y escuelas, de acuerdo con los demandantes.
Durante una audiencia respecto a una demanda que busca restituir el programa, el juez Edward Chen también refirió un memorándum que, dijo, indicaba que la decisión de terminar con el programa fue motivada por la política del gobierno de poner a “Estados Unidos Primero”. Pidió a un abogado del Departamento de Justicia que respondiera a las acusaciones de los demandantes de que dicha política estaba dirigida a excluir a los inmigrantes que no son blancos.
Chen decidirá si emite una orden preliminar para bloquear la decisión del gobierno de poner fin al Estatus de Protección Temporal (TPS por sus siglas en inglés) para los ciudadanos de las cuatro naciones mencionadas. No indicó cuándo emitiría el fallo.
El TPS se otorga a países devastados por desastres naturales o guerras. Permite que los ciudadanos de aquellos países vivan en Estados Unidos hasta que mejore la situación en su tierra natal.
La querella alega que la decisión del gobierno estuvo motivada por cuestiones racistas y pone como ejemplo la referencia soez de Trump para los países de África realizada durante una reunión sobre inmigración en la Casa Blanca en enero.
“Tenemos declaraciones discriminatorias descaradas provenientes de la persona más poderosa del gobierno”, dijo Ahilan Arulanantham, abogado de la Unión Americana de Libertades Civiles del sur de California, en la audiencia . Arulanantham representa a los demandantes.
Adam Kirschner, abogado del Departamento de Justicia, dijo que el memorándum que Chen refirió mostraba lo que la entonces secretaria interina de Seguridad Nacional , Elaine Duke, estaba pensando hacer sobre el TPS. Kirschner dijo que se esperaba la contribución de la Casa Blanca sobre un tema como ese, pero que la decisión final fue tomada por Duke.
Chen repitió el comentario soez de Trump sobre los países africanos cuando respondió que cualquier influencia que la Casa Blanca tuvo sobre Duke podría ser relevante.
Los salvadoreños recibieron TPS en 2001 tras un sismo, y el estatus se ha renovado en repetidas ocasiones. El gobierno de Trump anunció en enero que el TPS expiraría para el país centroamericano en septiembre de 2019.
El gobierno federal concluyó que El Salvador había recibido mucha ayuda internacional para recuperarse del sismo y que las casas, escuelas y hospitales habían sido reconstruidos.
En cuanto a los otros tres países, el gobierno de Trump también puso fin al TPS.
Más de 200,000 inmigrantes podrían enfrentar un proceso de deportación por el término del TPS y tienen más de 200,000 hijos con ciudadanía estadounidense que corren el riesgo de ser desarraigados de sus comunidades y escuelas, de acuerdo con los demandantes.