Entre los 10 muertos hay un estudiante de la Universidad de Iowa de 18 años, hallado detrás de un edificio del campus el miércoles por la mañana, cuando las temperaturas rondaban los -46°C.
El norte de Estados Unidos volvió a sufrir este jueves 31 de enero temperaturas polares que obligaron a las autoridades, por segundo día consecutivo, a cerrar escuelas, suspender vuelos y trenes, y abrir refugios de emergencia para los más vulnerables.
Se espera que las temperaturas bajo cero empiecen a remontar el viernes, pero el frío no cederá rápidamente en al menos 12 estados.
El pronóstico prevé que la temperatura todavía oscile entre los -20 y -50 grados Fahrenheit (-29 a -46 grados Celsius) en algunas zonas.
En la región de los grandes lagos, estas condiciones meteorológicas poco habituales provocaron fenómenos naturales sorprendentes.
En Chicago, el miércoles fue el segundo día más frío jamás recordado, donde residentes dijeron escuchar 'terremotos de hielo'.
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Problemas
La provisión de gas natural está bajo amenaza en Michigan y Minnesota, donde se pidió a los residentes reducir su consumo en la medida de lo posible.
Tuberías de agua congelada se rompieron en Detroit y partes de Canadá.
Más de 1,600 vuelos fueron cancelados en Chicago. En tanto, el Servicio Postal de Estados Unidos dijo que la distribución del correo continuaba suspendida el jueves en varios estados.
Se han establecido más de 270 'centros de abrigo' en edificios federales, centros comunitarios, bibliotecas e incluso estaciones de policía para aquellos que lo necesiten. Se estima que en Chicago hay unas 16,000 personas sin hogar.