Al menos tres de los miembros de los comandos de los ataques de Bruselas participaron, de manera más o menos directa, en los perpetrados en París en noviembre, lo que establece un vínculo formal entre los atentados más cruentos de la historia de Francia y de Bélgica.
Dos hombres buscados por los atentados de Bruselas
Los investigadores identificaron a Ibrahim El Bakraoui, de 27 años, y Najim Laachraoui, como los dos kamikazes del aeropuerto de Bruselas. Un vídeo de vigilancia los muestra empujando los carros de equipaje cerca de los mostradores. El tercer hombre que aparece al lado de ellos, con una chaqueta beige y un sombrero, sigue siendo buscado. Según el fiscal federal belga Frédéric Van Leeuw, 'su bolso contenía la carga más importante'
Khalid El Bakraoui, de 29 años, fue identificado como el kamikaze del metro. La policía busca a un segundo sospechoso de participar en ese ataque. Las imágenes de vigilancia del metro muestran que, antes de subir al tren en el que se hizo estallar, Khalid El Bakraoui habló con otro hombre, que permaneció en el andén.
Dos atentados, un solo grupo
Los hermanos Bakraoui y Najim Laachraoui están vinculados con los atentados del 13 de noviembre, que causaron 130 muertos en París. Khalid El Bakraoui es sospechoso de haber alquilado una vivienda en Charleroi (Bélgica), utilizada por los yihadistas de París antes de los ataques.
Laachraoui, de nacionalidad belga y de 24 años de edad, es considerado por la policía francesa como artificiero y posible coordinador. Su ADN fue encontrado en material explosivo delante del Estadio de Francia y el teatro Bataclan, blancos de los ataques del 13 de noviembre, y en un departamento del barrio Schaerbeek de Bruselas que pudo servir como taller de fabricación de las bombas.
También él, con la identidad falsa de Soufiane Kayal, fue controlado el 9 de septiembre en la frontera austríaca procedente de Hungría junto con Salah Abdeslam, participante en los atentados de París ahora detenido. Con ellos había un tercer hombre, Mohamed Belkaid, alias Samir Bouzid, muerto el 15 de marzo en un allanamiento en el barrio Molenbeek de Bruselas.
Los investigadores piensan que Laachraoui y Belkaid tenían los teléfonos identificados en Bélgica que fueron contactados por varios de los atacantes la noche del 13 de noviembre. Serían los destinatarios del SMS enviado desde el Bataclan: 'en marcha, empezamos'. 'Es el mismo grupo que estaba destinado a cometer atentados en Francia y Bélgica', resume una fuente cercana al caso.
¿Los atentados de Bruselas fueron acelerados por la detención de abdeslam?
La cuestión es si el avance de la investigación llevó a los yihadistas, acorralados, a precipitar la realización de los atentados. La tesis es respaldada por el 'testamento' de Ibrahim El Bakraoui, encontrado en una computadora tirada en un cubo de basura en la calle. El yihadista dice que 'no sabe qué hacer', que 'lo buscan por todos lados', según el fiscal belga. Con la muerte de Laachraoui, la célula pierde un artificiero. Y, según la fuente cercana a la investigación, para el grupo Estado Islámico 'es una prioridad proteger a sus artificieros'.
¿Salah Abdeslam va a hacer avanzar la investigación?
El décimo hombre de los atentados de París quiere ahora 'partir a Francia lo antes posible', afirmó el jueves su abogado, Sven Mary. Un cambio radical puesto que en un primer momento se opuso a su entrega a Francia. Su detención abre nuevas perspectivas en la investigación sobre los atentados de París, sobre cuya preparación y ejecución sabe necesariamente muchas cosas. 'Pero todo dependerá de él', señala la citada fuente. 'No dio elementos que hubieran permitido prevenir un nuevo atentado', el de Bruselas, agrega. Según su abogado, Abdeslam no estaba al tanto.