En Honduras las protestas estudiantiles parecen haberse salido de las manos de las autoridades educativas y del país en general.
Muy frecuente, los jóvenes salen a las calles a exigir beneficios o denunciar situaciones que 'parecen injustas'.
Sin embargo,una vez que participan en las manifestaciones, el desorden y los actos violentos siempre salen a flote.
Gran parte de la sociedad hondureña culpa a los padres de familia por permitir a sus hijos ser parte de esta acciones grupales que en varias ocasiones, han resultado en tragedia.
¿Qué haría usted si se encuentra con su hijo con el rostro cubierto y piedras en mano en una calle?.
En Baltimore, Estados Unidos, se ha suscitado un hecho que ha causado mucho asombro en el mundo.
Y es que un joven encapuchado que participaba en los disturbios de Baltimore no pudo ser sometido por la policía, pero sí por su madre.
La mujer a quien ya han apodado 'la mamá del año', obligó a su hijo a marcharse de la protesta, mientras le gritaba y le propinaba algunos golpes.
A empujones, jalones y cachetadas, una mujer retiró a su hijo de las protestas contra la brutalidad policial a raíz de la muerte de un joven afroamericano que estaba en custodia de la policía.
El muchacho reprendido se encontraba entre un grupo de manifestantes que lanzaba proyectiles a la policía cuando apareció, furiosa, su progenitora.
El incidente fue grabado por testigos y de inmediato atrajo la atención de los medios de comunicación y las redes sociales.