JALISCO, MÉXICO.- Una familia mexicana está viviendo, por primera vez en 16 años, la tranquilidad de saber que todos sus miembros están unidos, luego de que en 2005 su primer hijo les fuera arrebatado al nacer.
Yasir Macías y Rosalía López tuvieron a un varón el 13 de diciembre de 2005, en el Hospital Ayala, clínica 45 del Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS) en Guadalajara, Jalisco. Según su madre, el menor nació en horas de la tarde, pero a la mañana del siguiente día una mujer vestida de enfermera le dijo que tenía que llevarlo a la sala de pediatría y que pronto se lo devolvería, pero eso nunca ocurrió. Al parecer, la fémina era una falsa enfermera que logró burlar la seguridad del centro y se llevó a su bebé con rumbo desconocido.
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Desde ese momento los padres buscaron al pequeño, que llevaría por nombre Salvador y que sería conocido cariñosamente como “Chavita”, de forma incansable, usando la única foto que lograron tomarle en las horas que estuvo con ellos, pero todo fue inútil. Además, explicaron que en aquella época el internet no estaba tan presente en la mayoría de hogares, por lo que no había redes sociales para hacer su búsqueda masiva.
Los años pasaron y con el caso aún abierto, un tío del niño aconsejó a los padres que recurrieran a los métodos tecnológicos, por lo que el año pasado pidieron a los expertos que realizaran un retrato hipotético de cómo luciría el pequeño en la actualidad y el mismo se viralizó tras la desaparición de una niña en 2021 con un modus operandi similar al usado con “Chavita” en 2005; afortunadamente para los padres de la pequeña, la falsa enfermera que se la llevó la abandonó en un solar baldío horas más tarde y la bebé estaba en perfectas condiciones.
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Fue así que la gente comenzó a recordar a “Chavita” (Apodo de Salvador) el niño robado en 2005 y los medios volvieron a darle visibilidad a la angustiada familia. Una comunicación anónima permitió ubicar a un menor de edad con las características del desaparecido y las autoridades se movilizaron en su búsqueda.
La Fiscalía detalló a través de un comunicado que tras ubicarlo y rescatarlo en el municipio de El Salto, “fue resguardado por personal de esta dependencia y posteriormente se le practicaron las confrontas genéticas correspondientes para confirmar que se trata de la misma persona sustraída”.
El resultado de ADN con ambos padres fue de un 99.99%, comprobando que era el niño que tanto buscaban. Sus padres y las autoridades coincidieron en que se trata de “un milagro”.
Por el momento el menor está bajo resguardo estatal y con atención psicológica, pues durante toda su vida ignoró que había sido robado de los brazos de su madre y ahora debe procesar lo ocurrido y la nueva vida que le espera junto a sus padres y hermanos.
Por su parte, todavía no se ha podido ubicar al hombre y la mujer que criaron al menor, quienes son los principales sospechosos de su rapto.
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