El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, rechazó este miércoles la separación de familias migrantes en Estados Unidos y la retención de menores en centros de acogida, y pidió respetar sus derechos humanos.
'Como seres humanos no podemos aceptar la separación de padres e hijos que está ocurriendo en la frontera sur de los Estados Unidos. Como dirigentes nos toca buscar la aplicación del respeto por los derechos humanos, sobre todo de los niños', escribió Varela en Twitter.
Poco antes, la cancillería panameña expresó en un comunicado su 'preocupación por la situación que viven familias centroamericanas' que están sufriendo la situación.
Más de 2,000 niños han sido separados de sus padres en la frontera entre el 5 de mayo y el 9 de junio por una política migratoria de tolerancia cero, que hace que quienes ingresen clandestinamente en Estados Unidos enfrenten cargos criminales.
El departamento de Salud y Servicios Humanos estadounidense tiene bajo su cuidado 11,700 niños y menores de edad extranjeros en unos 100 albergues.
Ante ello, Panamá 'hace un llamado a abordar la situación migratoria de manera integral, con acciones que garanticen la reunificación familiar de quienes están siendo afectados', agrega el comunicado.
'Como madre se me desgarra el corazón al ver las imágenes de niños que son separados de sus padres', escribió por su parte en Twitter la canciller panameña, Isabel de Saint Malo.
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