Washington, Estados Unidos
El gobierno del presidente Barack Obama presentó este viernes a la Suprema Corte una apelación para levantar el bloqueo, determinado por instancias inferiores, a las medidas de alivio migratorio anunciadas hace exactamente un año y que beneficiarían a millones de personas.
El documento de 45 páginas de extensión al que AFP tuvo acceso, que lleva la firma del Procurador General de Estados Unidos, Donald Verrilli, pide a la Suprema Corte que inicie una 'revisión inmediata' del caso y reafirma la autoridad del presidente para firmar decretos sobre política migratoria.
Un año después de anunciadas por el presidente Obama en un mensaje a la nación, los decretos permanecen bloqueados por decisión de un juez de Texas, quien aceptó un pedido de 26 Estados contrarios a la aplicación de las medidas.
Obama había anunciado la extensión de un programa nacional de regularización, originalmente destinado a jóvenes, para que se puedan beneficiar también sus padres, en una conjunto de medidas que podría ayudar a unos cuatro millones de personas a normalizar su situación.
El paquete de medidas anunciado por Obama también modifica los criterios de prioridades para deportación, en una tentativa para evitar dividir familias que incluyen miembros con situación legal en el país.
El documento sostiene que el bloqueo judicial a las medidas migratorias 'tiene un impacto humanitario de largo alcance y además irreparable'.
Esto porque 'impide aproximadamente a unos cuatro millones de personas (...) de recibir autorización para trabajar legalmente' en Estados Unidos'.
De esta forma, el bloqueo a las medidas migratorias 'tiene un profundo efecto no apenas sobre los padres sino también sobre los niños'.
'Sin permiso de trabajo, ellos probablemente trabajarán para personas que los contratarán ilegalmente, por salarios por debajo del mercado, con efectos perjudiciales para los trabajadores estadounidenses', añadió el documento.
El 10 de noviembre, una corte de Apelaciones del Quinto Circuito, en Nueva Orleans, mantuvo el bloqueo a los decretos decidido originalmente por una corte distrital de Texas en enero.
Para obtener ese bloqueo, los 26 Estados cuestionaron la autoridad constitucional de Obama para firmar esos decretos, alegando que se trata de una cuestión bajo análisis del Congreso.
El gobierno del presidente Barack Obama presentó este viernes a la Suprema Corte una apelación para levantar el bloqueo, determinado por instancias inferiores, a las medidas de alivio migratorio anunciadas hace exactamente un año y que beneficiarían a millones de personas.
El documento de 45 páginas de extensión al que AFP tuvo acceso, que lleva la firma del Procurador General de Estados Unidos, Donald Verrilli, pide a la Suprema Corte que inicie una 'revisión inmediata' del caso y reafirma la autoridad del presidente para firmar decretos sobre política migratoria.
Un año después de anunciadas por el presidente Obama en un mensaje a la nación, los decretos permanecen bloqueados por decisión de un juez de Texas, quien aceptó un pedido de 26 Estados contrarios a la aplicación de las medidas.
Obama había anunciado la extensión de un programa nacional de regularización, originalmente destinado a jóvenes, para que se puedan beneficiar también sus padres, en una conjunto de medidas que podría ayudar a unos cuatro millones de personas a normalizar su situación.
El paquete de medidas anunciado por Obama también modifica los criterios de prioridades para deportación, en una tentativa para evitar dividir familias que incluyen miembros con situación legal en el país.
El documento sostiene que el bloqueo judicial a las medidas migratorias 'tiene un impacto humanitario de largo alcance y además irreparable'.
Esto porque 'impide aproximadamente a unos cuatro millones de personas (...) de recibir autorización para trabajar legalmente' en Estados Unidos'.
De esta forma, el bloqueo a las medidas migratorias 'tiene un profundo efecto no apenas sobre los padres sino también sobre los niños'.
'Sin permiso de trabajo, ellos probablemente trabajarán para personas que los contratarán ilegalmente, por salarios por debajo del mercado, con efectos perjudiciales para los trabajadores estadounidenses', añadió el documento.
El 10 de noviembre, una corte de Apelaciones del Quinto Circuito, en Nueva Orleans, mantuvo el bloqueo a los decretos decidido originalmente por una corte distrital de Texas en enero.
Para obtener ese bloqueo, los 26 Estados cuestionaron la autoridad constitucional de Obama para firmar esos decretos, alegando que se trata de una cuestión bajo análisis del Congreso.