SAN SALVADOR, EL SALVADOR.-El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, cuestionó este sábado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), un órgano de la OEA, por rechazar el régimen de excepción que rige desde hace siete meses para combatir las pandillas en el país centroamericano.
“Si la @CIDH fuera un verdadero organismo de Derechos Humanos estaría feliz de que en El Salvador se proteja tan fuertemente el derecho humano más importante: el derecho a la vida. Seguimos guerra contra pandillas”, escribió Bukele en Twitter.
Tras una escalada de 87 asesinatos perpetrados en dos días en el país, Bukele, con el respaldo del Congreso dominado por el oficialismo, instauró el 27 de marzo un régimen de excepción que ha sido prorrogado mes a mes, el cual permite detenciones sin orden judicial. Unos 57.000 presuntos pandilleros han sido detenidos hasta ahora.
DE INTERÉS: Reanudar proceso de negociación de México piden los presidentes de Francia, Colombia y Argentina
El viernes, la CIDH, un ente autónomo de la Organización de los Estados Americanos, expresó “preocupación” por las prórrogas a este régimen y por la “persistencia de detenciones masivas y presuntamente arbitrarias” sin cumplir “garantías judiciales”, por lo que llamó al Estado salvadoreño a cumplir sus obligaciones de derechos humanos.
“Preocupa particularmente la muerte de al menos 73 personas detenidas durante el régimen de excepción”, señala el comunicado de la CIDH.
El Salvador reportó, según la CIDH, más de 116.000 muertos producto de la actividad criminal de las pandillas.
En un video en Twitter, Bukele se preguntó “qué hizo la CIDH en los últimos 30 años cuando las pandillas estaban masacrando a nuestro pueblo”.
Y agregó: “Lo único que demuestra la CIDH es de qué lado están ellos: si están del lado de la gente honrada o están del lado de los delincuentes”.
ADEMÁS: ¿Qué temas abordarán Joe Biden y Xi Jinping durante su reunión en Bali?
En el comunicado, la CIDH subraya que “la suspensión de derechos y garantías constituye una disposición para circunstancias extraordinarias y no un medio para enfrentar el crimen común, por lo que el Estado de El Salvador debe asegurar que los regímenes de excepción cumplan los requisitos del artículo 27 de la Convención Americana”, establecido para casos de guerra o de otra emergencia.
Pero Bukele fue enfático: “Nosotros vamos a hacer lo mejor para los salvadoreños diga lo que diga la CIDH”.
Una encuesta de la Universidad Centroamericana (UCA) publicada en octubre mostró que el 75,9% de los salvadoreños aprueba el régimen de excepción, y nueve de cada 10 salvadoreños aseguran que la delincuencia “ha disminuido” con la política de Bukele.