Debido a la premura para inocularse de último momento, la tasa de vacunación subió a 83% entre policías, bomberos, recolectores de basura y otros trabajadores de la ciudad que estaban obligados a hacerlo a más tardar hasta las 8:00 de la noche del viernes, desde 76% el jueves.
Los más de 26,000 trabajadores que no hayan cumplido con el requisito serán puestos en licencia sin goce de sueldo a partir del lunes, debido a lo cual la Gran Manzana tendrá que prepararse para enfrentar posibles cierres de estaciones de bomberos, disminución de policías y personal de ambulancias, así como acumulación de basura.
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Las tasas de vacunación entre los departamentos de bomberos y sanidad de la ciudad aumentaron de forma considerable porque los trabajadores acudieron apresuradamente a recibir sus dosis a fin de cumplir con la obligatoriedad de las inoculaciones y un incentivo extra: quienes lo hicieran el viernes recibirían 500 dólares.
En el Departamento de Bomberos, la tasa de vacunación subió 8% y en el departamento de sanidad 10% después que sus respectivos elementos se vacunaran el viernes, según cifras de la ciudad. En el caso de los departamentos de bomberos y sanidad, el 23% de su respectivo personal continuaba sin vacunarse.
En el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD por sus siglas en inglés) los vacunados aumentaron 5% el viernes, lo que significa que 16% de sus agentes no se han aplicado dosis alguna.
Las autoridades de la ciudad están sopesando diversas contingencias para enfrentar una falta de personal que se prevé sucederá a partir del lunes.
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