En medio de todo el estancamiento y los retrocesos que ha sufrido Honduras en los últimos años, también existen avances, algunos con reconocimiento internacional, como lo evidencia el reciente galardón recibido por el presidente Lobo de la FAO por el cumplimiento anticipado del objetivo del milenio relacionado con la disminución del hambre.
Según datos de la Encuesta Nacional Demográfica de Salud (Endesa 2011-2012) el país también ha logrado avances significativos en la disminución de la mortalidad infantil, tanto que incluso Honduras se acerca también al cumplimiento de ese otro objetivo del milenio establecido para ser alcanzado en 2015.
En Honduras morían 29 niños por cada mil nacidos vivos en 2006, pero para el año pasado la cifra había bajado a 24, lo que significa 5 defunciones menos, según la Endesa.
Los datos señalan que las tasas más bajas de mortalidad infantil se reportan en Olancho y Santa Bárbara, con 17 y 18 muertes por cada mil, respectivamente.
Por el contrario, los departamentos de Islas de la Bahía y Gracias a Dios tienen los índices más altos con 63 y 51 muertos, respectivamente, por cada mil niños nacidos vivos.
Esta disminución de la mortalidad infantil es atribuida al incremento de la atención del parto y puerperio en la que el 83 por ciento de los nacimientos fueron atendidos a nivel institucional lo que refleja un aumento de atención del 16%.
La disminución del hambre y de la mortalidad infantil en los últimos años, pese al agravamiento de la crisis socioeconómica, la inseguridad y la incertidumbre política, es una clara muestra de que a pesar de todas las dificultades se pueden lograr avances en la medida en que los cooperantes internacionales mantengan la vigilancia y pero también su ayuda hacia los burócratas mejor intencionados.
Estamos pues, ante dos éxitos que no solo deben enorgullecernos como hondureños sino servir de ejemplo para irradiarlos hacia otros campos a fin de ir sacando a Honduras de la crisis en la que actualmente se encuentra.
Es bueno saber que también somos capaces de hacer las cosas bien.
