Tegucigalpa, Honduras
Con una sentencia de 33 años de prisión ha terminado la novela de Kevin Joshua Solórzano, el estudiante universitario que asesinó al exfiscal del Ministerio Público, Edwin Geovanny Eguigure.
Este jueves, el Poder Judicial oficializó que Solórzano purgará una pena de 20 años de prisión por haberle quitado la vida al exfiscal y 13 años y cuatro meses por haber atentado contra la vida de la abogada María Auxiliadora Sierra viuda de Eguigure.
En la actualidad, el universitario tiene 23 años de edad, ha estado tres años en prisión, por lo que estará 30 años más tras las rejas, y será hasta los 50 años de edad que podrá recuperar su libertad.
Los jueces impusieron al universitario la pena mínima en este caso, tomando en cuenta que la máxima por asesinato es de 50 años de prisión y por tentativa de asesinato, 20 años de reclusión.
Tras un largo proceso de juicio oral y público, finalmente los jueces en una determinación que no fue unánime, es decir, que uno de los togados se opuso al fallo, el universitario fue encontrado culpable de los delitos de asesinato y tentativa de homicidio el 8 de febrero pasado.
Siete meses más tarde, la pena concreta contra Solórzano fue oficializada.
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Esta fue rechazada por la defensa del universitario. Los defensores este viernes se notificarán para conocer los detalles de la pena impuesta.
“Esto que ha ocurrido del dictado de la sentencia es una arbitrariedad judicial, con seis meses de retraso, Kevin tiene su prisión preventiva vencida y que todavía no se ha resuelto su recurso de exhibición personal puesto que venció el plazo de prisión preventiva y la sentencia no se había dictado”, reaccionó Jair López, abogado del joven.
Asimismo, aseguró que la condena de 33 años de prisión es consecuencia de lo que ocurrió en el mes de febrero en donde a Kevin lo declararon culpable de estos hechos, “con lo cual no esperábamos otra cosa”, dijo López, quien además indicó que desde hoy comenzarán a estudiar la sentencia para evidenciar en qué se basaron los jueces para condenar al universitario.
Esta historia se remonta al 11 de noviembre de 2014, en la aldea El Chimbo, municipio de Santa Lucía, mientras la víctima junto a su esposa e hijos se dirigía hacia su vehículo, que estaba estacionado a un kilómetro de su casa, cuando fue atacado en el trayecto por tres personas del sexo masculino.
Los tres hombres se encontraban esperando a la víctima, se le acercaron, sacaron su arma de fuego y apuntándole con la misma le dijeron que se trataba de un asalto por lo que los hijos de la pareja salieron corriendo rumbo a su vivienda.
Los homicidas tras lanzar al suelo a Eguigure le infirieron múltiples heridas con arma blanca tipo cuchillo en la cabeza y abdomen, enseguida le dispararon en la cabeza provocándole la muerte de manera inmediata.
El testimonio brindado en juicio por María Auxiliadora Sierra fue clave para condenar al universitario.