Partido Nacional propone cuatro reformas electorales

TEGUCIGALPA, HONDURAS

Cuatro reformas electorales comprende una propuesta que ayer presentó el gobierno a la Comisión Especial de Asuntos Electorales que se encontraba participando en las reuniones del Congreso Móvil en Gracias, Lempira, con motivo del Mes de la Identidad Nacional.

El ministro de la Presidencia, Ebal Díaz, viajó con “carácter de urgencia” a aquella ciudad para entregar el documento que comprende la elección de diputados por distritos, una nueva tarjeta de identidad y depuración del censo nacional electoral, la ciudadanización de las mesas electorales receptoras y la regulación de la reelección presidencial.

La propuesta fue recibida por el vicepresidente del Congreso, Antonio Rivera Callejas, quien también funge como vicepresidente de la Comisión Especial y quien lo hizo en representación del presidente Elvin Santos, que no asistió al Congreso Móvil.

La iniciativa recoge el pensamiento del presidente Juan Orlando Hernández, quien considera que ya es necesario que haya resultados después de 15 reuniones improductivas de las mesas técnicas comprendidas en el prediálogo que se ha celebrado en la sede de las Naciones Unidas.

Dirigentes políticos cuestionaron, sin embargo, que el gobierno haya corrido a presentar estas iniciativas siendo que el diálogo está a punto de iniciar y que solo faltan detalles por ultimar.

Los diputados por distritos
El partido de gobierno propone la creación del sistema de escogencia de diputados por distritos, que sustituiría al cociente departamental electoral que se usa en la actualidad, el cual resulta de la sumatoria de los votos válidos por departamentos dividido entre el número de cargos a elegir por ese departamento.

El gobierno propone crear el sistema uninominal, que consiste dividir el país en 128 distritos electorales de donde saldrá electo el diputado que mayor cantidad de votos obtenga. Este sistema, según el plan nacionalista, generará “una fuerte relación geográfica entre los distritos y sus representantes”.

Además, se reflejará “la habilidad de los distritos para tener representantes directos”.

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La nueva tarjeta
El gobierno argumenta que el país necesita una nueva tarjeta de identidad porque la actual tiene 22 años de circular y ha sido usada, en la mayoría de los casos, en seis procesos electorales.

Una nueva identidad depurará de manera automática el Censo Nacional Electoral en virtud de que la población fallecida quedará al margen del listado de electores que en todos los procesos es cuestionado bajo el argumento de que en Honduras los “muertos votan”.

Las propuesta nacionalista se contrae a ordenar al Registro Nacional de las Personas (RNP) “levantar un nuevo empadronamiento del cien por ciento de la población apta legalmente para solicitar una tarjeta de identidad”.

Mediante este empadronamiento “se registrarán los datos biográficos y biométricos de las personas tanto en el país como en el extranjero”. Los operativos para actualizar estos datos se harán a nivel nacional en barrios, colonias, caseríos, centros de trabajos e instituciones educativas.

Al ciudadano se le pedirá sus datos biográficos, demográficos y biométricos (huellas dactilares, fotografía y firma).

La exposición de motivos de la propuesta nacionalista reconoce las debilidades del actual censo nacional electoral. “Esta desactualización implica que en la base de datos figure un número, que sería relativamente alto, de personas difuntas, de personas con domicilio diferente al real y de personas que han emigrado”.

“Por otro lado”, agrega, “esta base de datos tiene un número de inconsistencias relativamente alto respecto a la base de datos del Registro Civil, aunque estas inconsistencias no representarían un problema significativo para el TSE (Tribunal Supremo Electoral).

“El censo electoral es impreciso y por tanto no es fiable, esto constituye un riesgo para los procesos electorales”, afirma la propuesta. Esta iniciativa cita el informe de los observadores de la Unión Europea (2013 y 2018), según el cual “un 30% (2013) de los registros son personas fallecidas o emigrantes más un número impreciso de votantes inscritos en ciudades o pueblos improbables a su centro de votación”.

Con una nueva tarjeta de identidad “se tendría un censo real de las personas que se encuentran emigradas al ser empadronados a través de los diferentes consulados de Honduras en el exterior”. Por otro lado, “la ciudadanía tendría actualizado su domicilio electoral”.

El proceso de licitación deberá ser transparente y con la veeduría de la sociedad civil y los partidos políticos.

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Las mesas
Las mesas electorales receptoras -constituidas por los representantes de los partidos políticos- por ahora son las responsables del escrutinio y elaboración del acta original de cierre, que sirve al TSE para elaborar el escrutinio final. Esta es la parte más sensible del proceso electoral que se convierte en la comidilla de los políticos en cada elección.

El Partido Nacional propone que los miembros de las mesas “no sean propuestos por los partidos políticos, alianzas y candidaturas independientes”. “El cargo de miembros de las juntas electorales es honorífico y obligatorio”, añade.

La reelección Finalmente, el Partido Nacional sugiere regular la reelección presidencial reformando la ley “para que el ciudadano que haya ejercido o ejerza la Presidencia de la República pueda ser nuevamente elegido por una sola vez de manera continua o alterna en elecciones democráticas, alternas o transparentes”.