TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En cada cargamento de drogas que sale de Sudamérica, lo que está en juego es el millonario costo en dólares que percibirán por su venta.
Desde ese momento se forma una cadena de crimen organizado que va desde el tráfico de la droga, la venta del producto y el traslado del dinero hasta los lavadores de activos.
Informes de inteligencia indican que aparte de las caletas y la bóvedas, los narcotraficantes están convirtiendo en piezas de oro sus incontables ganancias producto de la narcoactividad.
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Además utilizan el sistema financiero, pero ya no les es rentable debido a que por algunas de las restricciones establecidas se vuelven un blanco perfecto para los cuerpos de investigación.
Para el caso, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS) reportó en el 2017 un total de 1,025 operaciones atípicas.
De estas, la Fiscalía Especial contra el Crimen Organizado del Ministerio Público (MP) requirió información de 165 casos, mientras que las unidades de inteligencia solicitaron información de 370 casos.
Expertos consultados por EL HERALDO consideraron que estas transacciones atípicas pueden tener relación directa con los líderes del narcotráfico en Honduras, que andan desesperados en lavar las millonarias ganancias que perciben.
Lavado
El analista en temas de seguridad y narcotráfico Raúl Pineda Alvarado indicó que las formas de lavado de activos son variables, sobre todo en inversiones y en el sistema financiero.
En el mundo del narcotráfico, después del dueño de la droga, el personaje principal es el encargado de lavar el dinero.
Esta persona es la única que tiene acceso directo al cartel, ya que su trabajo es darle apariencia de legitimidad a los grandes recursos que genera esta actividad ilegal.
Lo primero que buscan es ingresar al sistema financiero, donde reciben estos fondos con porcentajes de ganancia hasta del 30 por ciento.
Es decir que de 100,000 dólares, el traficante de estupefacientes únicamente recibe el costo de $70,000, el resto es para el que se encargará de legalizar esas cantidad de dólares.
Otros realizan inversiones en negocios que no generan rentabilidad y lo único que hacen es hipotecarlos, ya que el sustento económico proviene de la legitimidad que le da un préstamo bancario o un cheque certificado.
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Al final este dinero, ya limpio, llega al jefe de la droga, generando competencia desleal contra los inversionistas correctos.
El gran lavado, según el analista, se registra en inversiones inmobiliarias en ferreterías, centros comerciales, ganadería o compras de tierras, que después sirven como avales para préstamos hipotecarios.
Sin embargo, los narcotraficantes en los últimos años se han dedicado a la actividad de comprar oro, ya que es un producto imperecedero. La ventaja del oro es que puede ser embodegado o enterrado sin deteriorarse como sucede con los billetes de a dólar.
Se maneja que los narcotraficantes han contratado a especialistas en oro, para que vengan a fundirlo con toda la técnica que demanda esta actividad y eso es lo que respalda su futuro económica.
Los márgenes de utilidad de los narcotraficantes sobrepasan el 2,000 por ciento y por eso les es difícil legalizar todo el dinero que perciben y colocarlo en el sistema financiero es complicado.
Al aparecer una exagerada cantidad de dólares en el mercado, la UIF o el Banco Central de Honduras (BCH) detectan que algo anormal está pasando y lo reportan al MP.
Es por esta situación que prefieren hacer las inversiones directas o comprar bienes.
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Traslado
Análisis de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) indica que con la captura de los principales líderes de la narcoactividad en Honduras han quedado al frente de los carteles los mandos intermedios.
Estos son los que están tomando el control de esta actividad criminal, haciendo el trabajo de la compra, traslado y distribución de droga.
Los narcotraficantes viajan desde el occidente, es decir Copán, Santa Bárbara y Ocotepeque, hacia Colón, Olancho y el sector norte del país.
En todo ese trayecto van cargados con dólares para comprar la droga y luego la llevan a sectores fronterizos con Guatemala, donde la revenden.
Los cargamentos vienen directamente desde Colombia, Perú y Venezuela, luego pasan por Honduras, porque es el lugar más estratégico y los carteles de otros países, mandan los dólares para pagarlo.
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Según el agente de Fusina, el trabajo de inteligencia y la tecnología que han venido empleando ha permitido dar fuertes golpes a estos grupos, que están incrementando su actividad criminal.
Pero los golpes son mínimos, ya que según inteligencia el 60% de la droga que pasa por Honduras es vía marítima, el 30% en narcoavionetas y el 10% en vía terrestre.
Donde se han dado la mayoría de los golpes al narcotráfico es vía terrestre, con la incautación de drogas y más de 1.6 millones de dólares.
En altamar se vuelve casi imposible detectar el tráfico de drogas, mientras que en el aire no existen reportes de las Fuerzas Armadas (FF AA) de cuántas aeronaves han interceptado, solo se informa de las que aparecen abandonadas o incineradas.
Costo
Informes a los que tuvo acceso EL HERALDO indican que el precio por kilogramo de cocaína va aumentando a medida va escalando el traslado por los países del continente, hasta llegar a Estados Unidos.
Eso genera millonarias ganancias que evitan que esta actividad pare y, por ende, que el dinero sucio deje de fluir.
Los dólares en denominaciones de 20 son los más sospechosos, ya que el crimen organizado los prefiere por el peso y son los más adquiridos, debido a que eso cuesta al detalla la “línea” de la droga en el mercado norteamericano.
El último reporte de las agencias antidrogas de Estados Unidos establece que las cantidades movidas son millonarias.
El precio por mayor que manejan viene desde Sudamérica, donde la producen. En Perú el kilogramo de coca, cuesta entre 1,200 y 1,600 dólares, en Colombia el precio es de 1,600 a 2,600 dólares.
Cuando la droga llega a Panamá el precio ronda entre los 3,000 y 8,000 dólares por kilo.
Mientras que en Honduras, por donde según los mismos informes pasa el 80% de la droga que va hacia Estados Unidos unidos, el precio está entre 10,000 y 13,000 dólares, es decir 240,000 y 312,000 lempiras.
En México el precio llega a valer hasta 28,000 dólares y ya en Estados Unidos, donde se encuentra el gran mercado, el valor supera los 31,000 dólares.
Ya puesto un kilogramo de cocaína en Canadá ronda entre los 32,000 y 57,000 dólares. Se estima que al año a nivel mundial el narcotráfico mueve entre 426 y 652 billones de dólares.
Fuentes de EL HERALDO informaron que en la misma cantidad que pasa la droga, así pasa el dinero en efectivo.
Los dólares por el pago de la droga vienen en avionetas, barcos en carros particulares y muchas veces los carteles cancelan con el mismo producto para evitar perder el efectivo.
