TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Por lo menos cien empleados del Registro Nacional de las Personas (RNP) dejaron de laborar ayer en esta entidad porque sus contratos no fueron renovados por la Junta Interventora que llegó con la finalidad de darle un nuevo giro ahuyentándola, supuestamente, de la corrupción y del manoseo político.
Otros tres funcionarios que ocupaban puestos de relevancia también fueron despedidos por no ser compatibles con la política de los interventores, reveló una fuente a EL HERALDO.
Los cesanteados son German Reyes Cálix, administrador general; Elvin Castillo, pagador general; y la subjefa del departamento de Obras Físicas, Diana Romero.
Los cien empleados despedidos eran temporales, estaban bajo la modalidad por hora y casi siempre se les reactivaba su relación contractual, pero ahora pasarán al numeroso “ejército de los desocupados”, sin ingresos en esta época de Navidad.
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Ellos se suman a los 400 que a finales de septiembre, coincidiendo con la llegada de los interventores, corrieron la misma suerte en el RNP, una institución que nació a principios de la década de los ochenta bajo la influencia de los partidos políticos que desde entonces tienen su cuota de poder que los interventores dicen eliminarán.
Curiosamente, los jugadores del equipo de fútbol Infop, hoy Real de Minas, siguen laborando, según reveló a EL HERALDO uno de los cien despedidos. Aparentemente a estos se les prolongaron sus contratos hasta finales de diciembre.
Fue Gonzalo Fuentes, miembro suplente de la Junta Interventora, quien confirmó la salida de los trabajadores que están distribuidos en su mayoría en la capital. “Hoy se termina el contrato de cien personas que laboran en el Registro Nacional de las Personas en el Distrito Central y una persona de Nacaome, Valle”, dijo el funcionario.
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“Eso no está en nuestras manos porque eran contratos por hora que ya estaban predestinados con sus cláusulas específicas”, justificó. “No podemos ampliar los términos”, añadió.
