TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La inseguridad en el sistema de transporte público del país se está volviendo insostenible. Los ataques violentos hacia los operadores de las unidades entre buses y taxis se registran a diario.
Los pasajeros tampoco soportan la ola de asaltos en las unidades y muchos hechos violentos han terminado en tragedia, debido a que el sistema de transporte es inseguro.
Lo peor para los usuarios es que todavía no hay respuesta del Estado, para frenar a los asaltantes a mano armada, que han dejado muerte y momentos de terror.
Al cierre del 2018 el pequeño William Isaac Durón López, de apenas tres años, murió en un bus de la ruta urbana cuando un delincuente disparó en el interior de la unidad al momento que asaltaba a los pasajeros. Una joven empleada de un negocio de comida rápida narró a EL HERALDO que fue asaltada por un delincuente que iba en la unidad donde ella se transportaba.
“Lo más triste es que el cobrador me estaba cobrando el pasaje, sabiendo que me habían robado, ellos conocen a los asaltantes”, denunció.
Pero los criminales operan a sus anchas, debido a que ni los sistemas de tecnología que anunciaron las autoridades han comenzado a funcionar, mucho menos la Fuerza de Nacional de Seguridad al Transporte Urbano (FNSTU) que anunció el gobierno.
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Formación
Bajo este sombrío panorama, EL HERALDO consultó a las autoridades de la FNSTU cuándo tienen pensado comenzar a operar debido a que los usuarios y operadores de unidades los aclaman a gritos.
Farid Edgardo Zúniga, subcomisionado de la Policía y comandante de la FNSTU, afirmó que están trabajando en la conformación de un equipo especializado para dar seguridad en las unidades de buses y taxis.
Los efectivos están siendo seleccionados de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas (FF AA) y serán apoyados por las diferentes agencias y fuerzas de las instituciones armadas. Quienes integren este equipo especial usarán su uniforme reglamentario y serán identificados con un chaleco parecido al de la Dirección Nacional de Viabilidad y Transporte (DNVT).
Cada agente portará su arma de reglamento, las esposas, chalecos antibalas, en las rutas más críticas y los distintivos de la Fuerza y de la institución a la que pertenecen. La FNSTU realizará trabajos de prevención, reacción y de acercamiento con la población para ganar confianza con todos los sectores que participan en el rubro del transporte, es decir, los inversionistas, operarios y, sobre todo, los usuarios.
Los agentes ya fueron seleccionados y están en proceso de formación para que sepan cómo actuar en caso de un llamado de auxilio desde un bus o taxi.
El equipamiento además consiste en contar con patrullas tipo pick-up en todas las rutas, motocicletas con sus dos agentes y equipos especiales de reacción que estarán enlazados con el sistema de denuncias 911, para poder asistir a cualquier unidad
de inmediato.
Operaciones
Las operaciones comenzarán en Tegucigalpa, pero luego se extenderá hacia el valle de Sula, abarcando San Pedro Sula, Copán, La Ceiba y Choluteca. Dentro del plan operativo se tienen planificado colocar agentes en las terminales y estaciones de buses en las rutas más conflictivas.
Se tiene programado desarrollar patrullajes en carros y en motocicletas en la ruta de los buses para así garantizar la seguridad los operadores y usuarios. La FNSTU contará con una unidad de inteligencia que permitirá identificar a las estructuras criminales que se dedican a asaltar y extorsionar en este rubro.
Las operaciones se combinarán con la Fuerza Nacional Antimaras y Pandillas y con otras agencias de seguridad.
Los agentes en este momento deben pasar un proceso riguroso de evaluación con pruebas de confianza, además ser capacitados para poder cumplir con la misión encomendada y salir a las calles a combatir a los peligrosos criminales de asechan al transporte.