Investigación
TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Abandonado por el Consejo Directivo del Patronato Nacional de la Infancia (Codipani) quedó el Plan de Abordaje a las Reformas Institucionales para la reestructuración inmediata de las áreas críticas del Pani.
La reestructuración de la institución quedó a medio palo desde que en marzo de este año renunció la designada presidencial Olga Alvarado a su cargo de encargada presidencial ad honorem del Pani, quien supuestamente coordinaría las reformas institucionales. Después de esto no se nombró a nadie más.
Los directivos engavetaron la iniciativa junto con dos informes contundentes -uno realizado por una Comisión Especial creada por ellos mismos y el otro por el gobierno- donde comprobaron el descalabro financiero de la institución por la pésima administración, entre otras irregularidades.
El primero de estos informes nació por las denuncias de la Unidad Investigativa de EL HERALDO sobre las mafias al interior del Pani, el Consejo Directivo lo escondió, declarándolo en secretividad con la excusa de realizar cambios internos que nunca llegaron.
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Absolutamente todo lo que denunció EL HERALDO resultó ser verdadero, según el informe.
Al Codipani se le recomendó, entre otras cosas, realizar un estudio de costos de emisión, distribución, comercialización y trituración de cada pliego impreso versus el precio de venta.
Para mejorar sus finanzas se les solicitó desarrollar un sistema informático mediante algoritmos de seguridad para la venta por números. Igualmente se les pidió que agilizaran el proceso de adquisición de un nuevo equipo de impresión de billetes de lotería, al igual que un nuevo equipo de sorteo.
Se recomendó tomar las medidas de seguridad para resguardar de manera eficiente la lotería ya impresa. También se les solicitó mejorar los procesos de comprar por medio de la Ley de Contratación del Estado.
Además, se les sugería definir las responsabilidades de las muchas comisiones internas que hay en el Pani y que toman decisiones en temas presupuestarios.
Todas estas disposiciones eran parte de la reestructuración planteada, sin embargo, nunca se dio.
Informe secreto
La Unidad Investigativa de EL HERALDO accedió al informe final que presentó la Comisión Especial-Pani al Codipani, y en él se comprueban las denuncias realizadas respecto a las mafias, abusos, mal manejo administrativo, ventas irregulares de lotería y descalabro financiero en la institución.
Codipani escondió el informe final bajo la normativa de secretividad, pese a sendas resoluciones del Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP), que ordenaban entregarlo y que nunca fueron obedecidas.
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El documento fue realizado por la Comisión Especial-Pani, creada en la resolución número 003-2018 donde se determinó “nombrar una comisión especial para supervisar, transparentar y rendición de cuentas sobre el proceso de comercialización de la lotería nacional del Pani, conformado por personal especializado de las diferentes instituciones públicas y la Asociación Pediátrica que integran el Codipani”.
En el inciso V del informe se mostró la “relación sucinta de artículos publicados por un diario impreso de nuestro país”.
Se destacó las denuncias realizadas por EL HERALDO de manera individual: “Cartel opera en el Pani”, “Descalabro en el Pani”, “El Pani decide autoinvestigarse”, “Nadie sabe cuántos boletos de Chica imprime el Pani”, entre otros trabajos investigativos de EL HERALDO.
La comisión recolectó, evaluó y analizó la información, además de entrevistar a varios implicados.
Hallazgos
En las conclusiones del informe se detalló que se “pudo detectar que esta institución no cuenta con normas y procesos administrativos reglamentarios internos que regulen los mecanismos de emisión, distribución y comercialización de Lotería Nacional”.
Se destacó que la creación la “ventanilla especial” que denunció EL HERALDO denota “falta inexcusable en la supervisión y establecimiento de normas rígidas de regulación de procesos”.
El informe incluyó que en el Pani, la forma de vender y distribuir a los vendedores de lotería los números fraccionados es mediante un método “empírico y a discreción del vendedor, asimismo ninguna de las unidades o gerencias de la institución elaboran manuales legalmente aprobados”.
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Se denunció la forma empírica y a discreción con la que el Pani vende la lotería, el riesgo innecesario que corre el Pani al realizar el proceso de impresión y producción de los boletos de lotería con tres meses de anticipación.
También que la maquinaria de producción se encuentra obsoleta en el mercado y que “el proceso de impresión de numeros fraccionados con mayor demanda se realiza en base a los pronósticos que los vendedores de lotería proporcionan... sin contar con un sistema o mecanismo estadístico para determinar la oferta y demanda”.
Se aclaró que el Pani no cuenta con recurso humano calificado para el área de venta que pueda mercadear nuevos puntos.
Detalla que la Gerencia Administrativa no cuenta con proyección y planificación “adecuada para la obtención de bienes y servicios, lo que conlleva una falencia administrativa, provocando con ellos retrasos en la adquisición de premios de lotería mayor”. En el informe también se incluyó que la institución no cuenta con convenios legalmente suscritos con las instituciones que realizan la labor de venta de loterías, a excepción de Banrural.
Se advirtió sobre el descenso en las ventas, lo que conlleva a una pérdida en la comercialización.
En la sección de recomendaciones se recomendó “realizar un estudio de costos de emisión, distribución, comercialización, y trituración de cada pliego impreso versus el precio de venta de cada uno de ellos”.
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También se le solicitó al Codipani “autorice un estudio técnico en las áreas estadística, matemática y financiera el cual podría ser a través de agentes externos... Para determinar la demanda de los numeros más vendidos”. Actualmente lo hacen a con proyecciones que les dan los vendedores de lotería.
Se sugiere desarrollar un sistema informático de seguridad para la venta por números y que la venta de estos números más vendidos sea trasladada al sistema bancario.
Se urgió al Codipani, “agilizar el proceso de adquisición de bienes”, especialmente para una nueva máquina de impresión y sorteos.
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