TEGUCIGALPA, HONDURAS.-La migración de menores de forma ilegal a Estados Unidos se ha convertido en un grave problema en Honduras.
Las cifras establecen que en el mes de enero 233 menores viajaron solos y sin papeles a Estados Unidos, pero fueron retornados de México y Guatemala.
Eso significa que siete menores migran al día de Honduras, en promedio, sin contar con el consentimiento de sus padres. Además, otros 466 menores de edad fueron retornados, pero viajaban acompañados con sus padres o un familiar.
En total, fueron 699 menores de edad que emprendieron la “ruta de la muerte”, pero regresaron al territorio nacional, para luego trasladarlos a sus lugares de origen.
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Tania Padilla, del Programa Migración y Restitución Internacional de Niños, Niñas y Adolescentes, dependencia de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf), detalló que en total fueron 699 niños de los cuales “tenemos 466 que retornaron acompañados y 233 que retornaron solos”.
La funcionaria explicó que otros 429 menores fueron retornados de Guatemala y México, pero que habían viajado de manera legal, ya que cruzaron las fronteras de los países con sus documentos en regla, por lo que podemos decir que “tenemos un total desde principios de enero hasta la fecha de 1,128 niños y niñas retornadas”.
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Los puntos
Los menores y adolescentes que fueron retornados ingresaron a Honduras por las fronteras de Agua Caliente en Ocotepeque y El Florido, Copán y fueron trasladados al Centro de Atención de Niñez y Familia Migrante Belén, ubicado en San Pedro Sula, donde se les brindan atenciones psicológicas, sociales y jurídicas. “Debido a que la Dinaf desplazó personal a los puntos fronterizos a causa de la segunda caravana que se organizó desde San Pedro Sula, se pudo desarticular la intención de viajar de forma irregular, por lo que no se permitió la salida de apenas nueve niños”, destacó la funcionaria.
Recordó que la migración es un derecho humano, pero que se debe hacer bajo el respeto de las leyes de cada uno de los países por donde se va a transitar o del país de destino final.
“El Instituto Nacional de Migración también realizó las medidas para impedir la salida de la niñez migrante que va sin documentación y de los que viajaban solos”, dijo Padilla.
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Los menores migrantes retornados en el mes de enero, en su mayoría son originarios de los departamentos de Francisco Morazán y Cortés, y algunos de los departamentos del occidente del país.
En cuanto a las condiciones en las que regresan los menores, por lo general las más críticas son de salud, pues algunos presentan problemas estomacales, picaduras de insectos, infecciones respiratorias y en otros casos se presenta afectación psicológica por lo que vivieron en el trayecto del recorrido.
