TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Una temporada lluviosa con acumulados promedios similares a los del año anterior se pronostican para este año.
Eso se debe a que en los primeros seis meses va a imperar el fenómeno El Niño, pero en fase neutra hasta el mes de junio, según los análisis de los modelos meteorológicos.
De acuerdo con la perspectiva climática que comprende de enero a junio, se espera que las lluvias inicien en mayo, pero las precipitaciones serán entre ocho y diez días en el mes y en algunos de esos días las lluvias serán muy fuertes.
Francisco Argeñal, especialista en meteorología del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), explicó que “el problema que se va a presentar este año es que en pocos días va a caer la misma cantidad de lluvias”.
“El total de lluvias en el mes de mayo pueden ser parecidas al promedio de años anteriores, especialmente en el corredor seco”, especificó Argeñal.
Muy seco
Para la parte agrícola, los pronósticos no son tan favorables debido a la sequedad del suelo que ha sido arrastrada por la sequía del año pasado.
“El pronóstico es El Niño fase neutra, el que tiende a enfriarse después del mes de junio, pero no hay probabilidades de La Niña”, recalcó Francisco Argeñal. Explicó que aunque las temperaturas que se registran en el país son elevadas “no estamos en el fenómeno de El Niño”, pues a pesar de que estamos en fase neutra “tenemos temperaturas un poco más arriba del promedio, pero sin llegar a El Niño”.
En relación con las temperaturas que se han registrado en el país cuando amanece fresco y luego se pone cálido en horas de la tarde, los pronósticos es que ese comportamiento va a persistir por los próximos cuatro o cinco meses. “Este mes de febrero ha sido más caliente en comparación a febreros de otros años”, destacó.
En cuanto a la siembra de primera, los especialistas en meteorología hacen un llamado a los productores que a partir del mes de marzo esperen las recomendaciones que brinden los técnicos de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) pues se va a tener de forma más precisa los días que van a caer las lluvias y los montos acumulados.
Si los agricultores no atienden las recomendaciones es posible que las pérdidas de los cultivos sean en un alto porcentaje, estimó.
