Siempre

Mensajes en voz de los vencedores de la XVIII Bienal de Escultura y Cerámica Centroamérica y el Caribe 2019

Marcio Arteaga y Pedro Pablo del Cid cuentan sus impresiones tras ganar

21.07.2019

TEGUCIGALPA, HONDURAS.-La XVIII Bienal de Escultura y Cerámica Centroamérica y el Caribe 2019 dejó como ganador del Premio Único de Escultura a Marcio Arteaga, mientras que el Premio Único de Cerámica recayó en Pedro Pablo del Cid. Ahora, unos días después de la ceremonia de premiación, los artistas se expresan...

Ambos coinciden en que obtener el máximo reconocimientos fue una sorpresa, pero en el trasfondo sabían que las piezas que postularon eran merecedoras de al menos una distinción. “Cuando empecé a elaborar la obra, a la que le puse bastante fe durante dos meses y medio de trabajo, yo me esperaba algo del evento. Mi hijo cumplía años justo ese día, así que la alegría fue doblemente grande al escuchar mi nombre”, recordó Arteaga, quien hizo de “Según la forma, tu paisaje”, la pieza acreededora al premio mayor.

Por su parte, Pedro Pablo del Cid contó que “fue una sorpresa total porque, de hecho, ni siquiera estaba seguro de si la pieza iba a pasar o no, si sería seleccionada para la muestra. Al ver tanta obra de alta calidad, por un momento dudé, aunque sabía que mi pieza tenía algo”. Para su impresión, “Éxodo” compartió la gloria.

Los dos creadores manifestaron su alegría al ser galardonados en un evento en donde se aprecia una amplia variedad de propuestas de alta calidad. “Creo que la escultura ha tomado bastante fuerza en el país y eso es increíble, porque de lo que más se ha hablado antes es de pintura. Se va avanzando en espacios culturales, poco a poco, pero se está haciendo”, comentó Arteaga.

Las piezas y su trasfondo
Para el ganador del Premio Único de Escultura, el proceso de elaboración de su pieza consistió en torcer el papel periódico necesario para elaborar 6,000 “monedas” y con ellas dar vida a su diseño. “En el camino fui cambiando la forma, porque hay cosas que el material no permite. Fui pegando las monedas a una estructura, como quien va a hacer una piñata, con alambre y varilla”.

Arteaga comenta que el nombre “Según la forma, tu paisaje” se debe al panorama que él percibe de Honduras. “La pieza es una instalación: lleva una base natural, hecha de tierra color rojizo, que simboliza el desierto en que está hundido nuestro país; el contenido del papel refleja la mucha información negativa y la poca positiva que se consume a través de noticias”.

Asimismo, agregó que también habla de la desigualdad económica y de cómo esta puede cambiar de un momento a otro, a lo que eluden las piezas en forma de moneda. “Hoy somos unos, pero de la noche a la mañana podríamos ser millonarios. La obra debe ir colgada porque para muchos la riqueza es inalcanzable. Por ahora, las fichas que caen en el desierto reflejan lo poquito que nos queda a la gente luchadora”.

Mientras tanto, Pedro Pablo del Cid presentó una obra elaborada en arcilla, casi en su totalidad, que una vez concretada pasó por un proceso de quema bastante complejo, para luego darle el acabado final. En alrededor de tres semanas “Éxodo” ya estaba lista.

“Mi escultura habla sobre la migración masiva que atravesamos en todos los países latinoamericanos, de cómo culturalmente esto ya es un problema hereditario para toda la región. Al tratarse de una realidad tan cruda la asocié con la textura y la desnudez que tiene la pieza, en donde los pies están descalzos, unos sobre otros. Añadí las mariposas monarca como muestra de esa analogía entre las migraciones masivas que se dan por naturaleza y la señal de esperanza que no debe perderse”.

Foto: El Heraldo

El guatemalteco Ambrocio Cholotio participa en la muestra con su obra “El gatillo titubeante”.

Nuevos retos para el IHCI
Y aunque la felicidad y satisfacción son evidentes tras su victoria,0 ambos creadores coinciden en que el Instituto Hondureño de Cultura Interamericana (IHCI) aún debe superar algunos desafíos.

“Yo gané esta misma bienal en 2013 y muchos compañeros y amigos me han dicho que desde ese punto se ha roto el paradigma. En las bienales anteriores generalmente se reconocía a artistas con gran trayectoria, de más de 20 o 30 años, y desde ese entonces hasta acá hemos sido jóvenes”, recordó Arteaga.

Sin embargo, el también pintor asegura que una de las cosas que siempre ha criticado es que en Honduras tiende a “revolverse todo”. “Si es instalación, es instalación; si es escultura, es escultura; si es cerámica, es cerámica. Habría que tener un espacio para cada cosa, porque cada rama tiene su significado. Evaluar, en este caso, mi obra, que era una instalación, en comparación con una escultura fija, es muy complicado y no sé si del todo correcto”.

En complemento, del Cid coincide en este último punto y agrega que el límite de edad en la categoría de cerámica es un reto a vencer, puesto que esta es una técnica antigua que tiene su propia historia. “Cada área tiene su complejidad y es extraño que las mezclen porque no hay un enfoque claro de qué es lo que se quiere. Igual, al ver que la recompensa en efectivo es menor, en comparación a la escultura, la categoría se minimiza y pareciera que es un segundo lugar”.

“Esta es la segunda vez que participo en el concurso, por lo que no soy el mejor conocedor de su historia, pero al menos el año pasado -en la bienal de pintura- hubo varias quejas en cuanto al jurado, por considerarlo algo flojo.

Esta vez me pareció que tenían criterios bastante justificables en cuanto a la evaluación de las piezas, todos estamos conformes con el resultado que se dio, así que podría decir que el proyecto va en evolución”, finalizó del Cid.