TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los restos de
Jimmy Alberto Martínez Flores, el
ingeniero agrónomo asesinado este jueves en la colonia Altos del Trapiche, en la
capital de Honduras, fueron retirados de la morgue del
Ministerio Público.
Entre lágrimas y lamentos, su esposa y demás parientes observaban cómo subían el ataúd a un vehículo para llevarlo al lugar de la vela.
El cuerpo del ingeniero agrónomo ingresó a la morgue capitalina la madrugada de este día, horas después de ser asesinado en el interior de su vivienda en la colonia Altos del Trapiche.
Momento cuando familiares retiran el cuerpo del ingeniero agrónomo de la morgue capitalina. Foto: Estalin Irías/ EL HERALDO. VEA TAMBIÉN: A cárceles de máxima seguridad mueven 421 reos, la mayoría pandilleros
La víctima de 28 años se encontraba con sus hijos, esposa y demás familiares cuando seis hombres con vestimenta militar ingresaron a la vivienda, dijeron miembros de la Policía Nacional.
Las investigaciones indican que los hombres con indumentaria militar llegaron en un pick up color negro, se bajaron y forzaron la puerta para entrar.
Familiares dijeron que los sujetos amarraron a la víctima, mientras se comunicaban por radio con alguien. Posteriormente, lo apuñalaron hasta dejarlo sin vida.
Entre lágrimas y lamentos, su esposa y demás parientes observaban cómo subían el ataúd a un vehículo para llevarlo al lugar de la vela.
El cuerpo del ingeniero agrónomo ingresó a la morgue capitalina la madrugada de este día, horas después de ser asesinado en el interior de su vivienda en la colonia Altos del Trapiche.
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La víctima de 28 años se encontraba con sus hijos, esposa y demás familiares cuando seis hombres con vestimenta militar ingresaron a la vivienda, dijeron miembros de la Policía Nacional.
Las investigaciones indican que los hombres con indumentaria militar llegaron en un pick up color negro, se bajaron y forzaron la puerta para entrar.
Familiares dijeron que los sujetos amarraron a la víctima, mientras se comunicaban por radio con alguien. Posteriormente, lo apuñalaron hasta dejarlo sin vida.
