CEDROS, HONDURAS.- Sin cabeza y en avanzado estado de putrefacción fue encontrado el cuerpo de un adolescente siete días después de su desaparición física.
El aterrador suceso se registró el domingo recién pasado alrededor de las 5:30 de la tarde, a un kilómetro del caserío El Guachipilín, en el municipio de Cedros, Francisco Morazán.
El menor respondía en vida al nombre de Kelvin Joel Soto Maradiaga, de 14 años de edad, residente en el caserío El Guachipilín, Cedros.
Kelvin Joel desapareció el lunes 5 de agosto a eso de las 5:30 de la tarde. El adolescente fue visto a esa hora por última vez en una de las calles del caserío y después no volvieron a saber nada sobre su paradero.
Los zopilotes los alertaron
Los familiares y pobladores de El Guachipilín lo buscaron hasta altas horas de la noche del lunes, pero no dieron por ningún lado con Kelvin.
La búsqueda continuó durante los seis días siguientes, pero fue infructuosa. El domingo, vecinos de la zona vieron extrañados que una bandada de zopilotes andaban cerca de la aldea, por la ribera del río de La Joya.
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Aquello les pareció raro. Varios de los colonos, incluidos los parientes del adolescente, se movilizaron a la zona tentativa donde podría estar el hedor que atraía a las aves de rapiña.
En medio de unos matorrales pudieron observar el cadáver de un niño sin cabeza, con las características del desaparecido Kelvin Joel.
El cuerpo fue llevado a Medicina Forense, en la capital, donde sus familiares serán sometidos a pruebas de ADN para confirmar o descartar que se trate de la humanidad del menor.
Los resultados podrían conocerse en las próximas horas. Los parientes dijeron desconocer los motivos por los que le habrían quitado la vida al menor.
