El presidente de Banco Nacional de Desarrollo Agrícola (Banadesa), Jonny Handal, lamentó que la muerte de dos empleados de la institución y dos soldados en un asalto pudo evitarse si se hubiesen movilizado en carros blindados,
pero la junta directiva de la entidad no ha querido aprobar la compra de esos vehículos.
“Yo pedí la compra de emergencia de dos carros blindados, pero la junta directiva dice que hay que someterse a una licitación y eso tarda seis meses”, criticó Handal.
Y a renglón seguido aseguró que “si les hubieran disparado con los carros blindados hubieran podido huir y no los hubieran matado”.
La solicitud de Handal fue de dos automotores tipo pick-up con un valor cada uno de un millón de lempiras.
Dos empleados del banco y dos soldados que se transportaban en un vehículo de Banadesa con 7.2 millones de lempiras fueron acribillados a la altura de la Unión, Danlí, por una banda que los emboscó.
Las víctimas fueron identificadas como Fredy Jonan Fonseca (50), José Encarnación Murillo (43), ambos trabajadores de Banadesa, y los soldados que los custodiaban Gerardo Enrique Sánchez (33) y Henry Oseguera Rodríguez (29).
Handal remarcó que no tiene dudas de que “alguien de adentro” del banco filtró información a los delincuentes porque el carro en el que transportaba el dinero no tenía identificación de Banadesa y tiene placas particulares.
El funcionario dijo que “a cada rato” se hacen movilizaciones de dinero en carros sin mayor protección por falta de recursos.
Recordó que cuando ingresó a la presidencia de Banadesa existía un inventario de 122 carros, algunos de los cuales no están en servicio actualmente porque están en mal estado.
Mientras, elementos de la Secretaría de Seguridad y del Ejército inspeccionaron ayer la zona del asalto en busca de pruebas y encontraron vasos y platos plásticos que habrían sido utilizados por los criminales para alimentarse mientras esperaban a sus víctimas.
