De acuerdo con versiones previas, en el momento del hecho, la madre de la víctima se encontraba lavando platos en la parte exterior de su vivienda, cuando de repente, escuchó el llanto angustiado de su hija de cinco años de edad.
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De inmediato acudió a percatarse de lo que sucedía y de manera sorprendida observó que la niña estaba ensangrentada y parcialmente sin su ropa de vestir.
Junto a la pequeña halló a su cuñado, un individuo de 38 años de edad, originario de Nacaome, Valle y residente en la aldea Moropocay.
Rápidamente la progenitora de la víctima solicitó ayuda a elementos de la Fuerzas Especiales de la Policía Nacional, que ejecutaban un patrullaje de rutina en el sector y lograron detener al supuesto violador.
Por su parte, la menor fue llevada con especialistas del departamento de Medicina Forense, quienes le realizaron los exámenes respectivos con el fin de sustentar, mediante prueba técnico científica, la culpabilidad del imputado.
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