TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Consternación, angustia y cada vez más preguntas rodean la desaparición de Belkis Molina, una joven independiente que con sus sueños e ilusiones intactas decidió emigrar de su natal San Francisco, Lempira, a Intibucá.
Los últimos hallazgos sobre su caso se remontan a la minuciosa inspección realizada, en las últimas horas, al supuesto vehículo Ford, color azul, que ella conducía el día que se perdió su rastro.
El caso ha tenido giros inesperados y EL HERALDO te trae una cronología de lo sucedido.
21 de julio: Desaparición
Belkis Molina, de 25 años, se presentó a su trabajo, donde laboraba como gerente en la cooperativa Cooperativa Mixta Lempira Sur (COMLESUL). Cumplió su jornada laboral y a las 5:00 de la tarde se subió a su camioneta. Esa fue la última vez que la vieron.
De acuerdo a declaraciones de su exmaestro, Wilmer Molina, la joven llamó a su mamá a las 10:00 de la noche y luego de eso desapareció sin dejar rastro.
Sus familiares encendieron las señales de alerta cuando el 22 de julio Belkis, quien se caracterizaba por ser puntual, no se presentó a trabajar.
Angustiados, realizaron formalmente la denuncia de su desaparición. Solo les restaba esperar respuestas satisfactorias de las autoridades.
12 días sin pistas
Casi dos semanas habían transcurrido y no había indicios de dónde se podía encontrar Belkis. Sus familiares, amigos y personas de San Francisco, Lempira, marcharon exigiendo su búsqueda implacable.
Su madre Isabel Gómez aprovechó para realizar un llamado desesperado a la presidenta Xiomara Castro, a quien le rogó ayuda para que las autoridades investiguen lo sucedido.
“Que me devuelvan viva a mi hija, yo ya estoy vieja y no soy nada sin mi hija”, dijo doña Isabel al ser abordada en diversos medios televisivos. Las demás personas que la acompañaban gritaban al unísono: “¡Viva la queremos!”.
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Día 13: Sectores se unen a la búsqueda
Otra marcha se formó en La Esperanza, Intibucá, lugar donde desapareció Belkis. Dos organizaciones de derechos humanos y feministas se unieron para exigir respuestas a las autoridades.
En un comunicado, ONU Mujeres y CARE lamentaron que “la violencia contra las mujeres y niñas en todas sus manifestaciones se ha incrementado de manera exponencial en todo el país”.
Seguidamente, el Centro de Desarrollo Empresarial de la Región de Lempira y varias instituciones socias, entre ellas la Cooperativa Mixta Lempira Sur (COMLESUL), donde Belkis trabajaba como gerente, también extendieron su apoyo para dar con el hallazgo de la joven.
Dos semanas después: Familiares angustiados
Dos semanas habían transcurrido y las autoridades aún no tenían respuestas de qué sucedió con la joven.
Dos familiares, decaídos y angustiados, se presentaron a las instalaciones de un canal local para suplicar a las autoridades agilizar la búsqueda de Belkis. Con cada día que transcurría, las esperanzas de encontrarla sana y salva se iban esfumando.
“Yo solo les suplico que yo la quiero a mi hija, verla, pero viva, no les pido más, solo es que la quiero ver viva. No puedo expresarme más porque mi situación no me da lugar”, decía su padre, don Álvaro Molina, entre sollozos y lágrimas.
Con su rostro desencajado y un notable cansancio, su hermana, María Molina, manifestó lo doloroso que era “llegar a la casa y ver que mamá se derrumba al no saber noticias de mi hermana”.
“Nosotros solo pedimos a las autoridades que nos apoyen en esta situación que estamos pasando y a quienes la tengan, por favor, que nos den información sobre ella”, suplicó la joven en medio del llanto.
Nuevos detalles en su apartamento
Wilmer Molina, exmaestro de la hondureña desaparecida, ha dialogado en diversas ocasiones con los medios de comunicación para explicar lo último que supo de la joven.
Según contó, en la casa donde vivía la joven encontraron las llaves de la oficina y también una computadora encendida.
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Además, agregó que había preguntado a los vecinos sobre alguna pista y varios indicaron que la vieron salir a bordo de su camioneta.
“Quedaron en su apartamento las llaves de su oficinas, su computadora encendida. Solo se sabe que salió en su camioneta, pero no vieron con quién”, mencionó el docente.
14 días de su desaparición: Emiten alerta amarilla
La viceministra de seguridad, Julissa Villanueva, dijo que la desaparición de Belkis es un tema interés para la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Seguidamente, Christian Nolasco, el jefe de la Unidad de Comunicación Estratégica de la Dirección Policial de Investigación (DPI), informó que se emitió alerta amarilla en el caso.
Lo anterior significa que la desaparición de Belkis está bajo una alerta mundial de posible secuestro o desapariciones inexplicables.
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Día 15: Detienen a un hombre que frecuentaba a Belkis
Luego de investigaciones por parte de la Policía, el viernes 5 de agosto se detuvo en un allanamiento a Alexis Noé Lemus, quien pudo haber tenido contacto con Molina antes de desparecer.
Christian Nolasco, vocero de la Dirección Policial de Investigación (DPI), dijo que el arrestado era “una persona que la frecuentaba, (ella) tenía comunicación con esta persona, no se puede decir que era su novio porque aparentemente no había informado sobre una relación ante los familiares ni nada, pero sí frecuentaba periódicamente. Se podría decir que pudo haber tenido una comunicación antes de desaparecer esta joven en ese sector”.
De acuerdo al reporte policial, al individuo se le encontró el carnet de trabajo escondido entre la base de la cama y el colchón. Los agentes policiales esperaban encontrar también el vehículo de la joven, pero no pudieron dar con él y el sujeto quedó retenido hasta realizar las investigaciones correspondientes.
+ Detienen a hombre que frecuentaba periódicamente a Belkys Molina
Por su parte, el sospechoso dijo a un medio de comunicación que lo estaban inculpando injustamente.
“Dios sabe lo que hace, el que nada debe, nada teme. No sé nada, me están inculpando de algo que no sé”, expresó.
Día 16: Encuentran su camioneta
El 6 de agosto las autoridades informaron que habían encontrado una camioneta similar a la que conducía Belkis en una zona alejada del municipio de Santa Cruz de Yojoa, en el departamento de Cortés, al norte del país; es decir, a más de dos horas de distancia de donde desapareció.
El vehículo, tipo camioneta, color azul, estaba en una galera tapado con un plástico rojo y no tenía placas.
Sin embargo, hasta ese momento no se había podido determinar si el automóvil pertenecía a la joven de 25 años o evidencia de dónde podría estar. La DPI informó que tenían que realizar investigaciones al respecto.
Día 18: El auto sí pertenece a Belkis
El comisionado de Policía, Miguel Martínez Madrid, informó que el auto encontrado en Santa Cruz de Yojoa sí pertenecía a Belkis. Dentro del mismo “se encontró una boleta de pago de impuestos a nombre de ella con las características del vehículo”.
El comisionado también brindó algunas pistas sobre la camioneta. Dijo que “el vehículo fue empolvado para proteger las huella dactilares que estaban en el exterior del vehículo”.
Además, mencionó que las personas que escondieron el vehículo, lo habían hecho con acto premeditado, pues le habían quitado las placas y lo taparon.
Por su parte, Edgardo Barahona, vocero de la Policía Nacional, detalló que al automotor se le realizó el peritaje correspondiente como mecanismo que puede ser utilizado en un juicio contra la persona responsable de haber raptado a la joven.