INTIBUCÁ, HONDURAS.- Acribillados a disparos perecieron un menor de 16 años y otro pariente suyo la mañana del sábado en una calle solitaria de la zona montañosa de San Francisco de Opalaca, Intibucá.
El doble asesinato ocurrió alrededor de las 11:30 de la mañana en el momento en que los ahora fallecidos regresaban a la aldea Ceibita, en el municipio de San Francisco de Opalaca, donde residían.
Las víctimas fueron identificadas como José Wilson Lemus Sánchez, de 16 años, y José Lucas Hernández Enamorado, de 29 años de edad.
“Salieron de la casa el viernes en la tarde por que iban a ayudarle a destazar una vaca a un amigo en la aldea La Palca, en San Francisco de Ojuera, en Santa Bárbara”, contó don Gregorio Lemus, padre de José Wilson.
Ya el sábado, con algunas libras de carne que el dueño de la res les había regalado por haberle ayudado en el destace, los dos jóvenes salieron con rumbo a Ceibita, a bordo de la motocicleta de José Lucas.
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Descartaron el asalto
Sus familiares en Ceibita se preocuparon por que ya era tarde y no tenían noticias de ninguno de los dos. Alrededor de las 12:30 del mediodía, un vecino de la aldea les comunicó que al parecer habían ultimado a disparos a José Lucas.
Don Gregorio y los familiares de José Lucas se movilizaron para el lugar que les habían indicado que sucedió el incidente, a unos kilómetros de la aldea Ceibita. Al llegar, con desesperanza constataron que no solo habían matado a José Lucas sino que también al adolescentes José Wilson.
“Ellos no andaban armas, ni un pedazo de machete caminaban, ellos andaban indefensos”, expresó Xiomara Sánchez, compañera de hogar de José Hernández.
Los familiares de ambos aseguraron desconocer cual fue el motivo del mortal ataque ya que ellos no tenían enemigos y tampoco andaban nada de valor como para que los asaltaran.
Agentes policiales asignados a San Francisco de Opalaca llegaron a la escena del crimen para hacer el reconocimiento de los cadáveres. Luego de una breve inspección les notificaron a la familia que las pocas pertenencias que ellos andaban aún estaban en sus bolsas por lo que descartaron un posible asalto.
Inclusive la motocicleta, propiedad de José Lucas estaba a un lado de los cuerpos sin vida.
900homicidios se registran hasta la fecha en el país, en el presente año. |
Hay una banda de asaltantes
Personal del Ministerio Público de la ciudad de La Esperanza, Intibucá se trasladó hasta el sector de San Francisco de Opalaca para realizar el levantamiento de ley y luego ser llevados a la capital de la República.
Parientes de los ahora occisos comentaron que en esa zona del occidente del país se ha formado una banda de forajidos que se dedican a asaltar y a cometer asesinatos, sin que nadie haga algo para poder aprehenderlos. Con mucha nostalgia, el campesino de tierra adentro Gregorio Lemus recordó que “él (Wilson) me había pedido una parcela de tierra para cultivar café por que se quería dedicar a la agricultura”.
José Hernández era padre de una niña de tres años de edad que había procreado con Xiomara Sánchez, quien a la vez es prima del también extinto José Lemus.
Los restos mortales de los dos agricultores fueron retirados la tarde del domingo de la morgue del Ministerio Público, en la capital, para ser llevados a la aldea Ceibita.
De los autores materiales del doble crimen se desconocen sus identidades y no hay una sola captura al respecto.