Tegucigalpa, Honduras
Los Juzgados de Tegucigalpa dictaron este martes auto de formal procesamiento contra Juan Santos Murillo Verde, acusado por el delito de incendio forestal.
El imputado -que irónicamente se apellida Verde- no tuvo ninguna consideración con el medio ambiente al prenderle fuego a dos hectáreas de bosque de pino y roble en las cercanías del cerro “ El Picacho”.
Murillo Verde fue acusado por la Fiscalia Especial del Medio Ambiente (FEMA).
El hecho se suscitó en la colonia Renacer de Tegucigalpa, el 15 de febrero de 2015, cuando unos guardabosques realizaban un operativo por esa zona y observaron que de un predio cubierto de bosque salía humo, por lo que llegaron al lugar y encontraron a Murillo Verde iniciando el fuego en dicho lugar.
El incendio rápidamente fue combatido por miembros del Cuerpo de Bomberos, lo que evitó que las llamas se proparagaran a las viviendas aledañas a ese sector.
A raíz de que el joven Murillo Verde se encontró infraganti, fue detenido inmediatamente por elementos de la Policía Nacional (PN) y se le decomisó una caja de fósforos.
Posteriormente la FEMA presentó requerimiento fiscal por el delito de incendio forestal y al realizarse la audiencia inicial se le dictó el auto de formal procesamiento con medidas diferentes a la prisión preventiva.
La Ley Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre, establece una pena de seis (6) a doce (12) años de reclusión por el delito de incendio forestal.
Los Juzgados de Tegucigalpa dictaron este martes auto de formal procesamiento contra Juan Santos Murillo Verde, acusado por el delito de incendio forestal.
El imputado -que irónicamente se apellida Verde- no tuvo ninguna consideración con el medio ambiente al prenderle fuego a dos hectáreas de bosque de pino y roble en las cercanías del cerro “ El Picacho”.
Murillo Verde fue acusado por la Fiscalia Especial del Medio Ambiente (FEMA).
El hecho se suscitó en la colonia Renacer de Tegucigalpa, el 15 de febrero de 2015, cuando unos guardabosques realizaban un operativo por esa zona y observaron que de un predio cubierto de bosque salía humo, por lo que llegaron al lugar y encontraron a Murillo Verde iniciando el fuego en dicho lugar.
El incendio rápidamente fue combatido por miembros del Cuerpo de Bomberos, lo que evitó que las llamas se proparagaran a las viviendas aledañas a ese sector.
A raíz de que el joven Murillo Verde se encontró infraganti, fue detenido inmediatamente por elementos de la Policía Nacional (PN) y se le decomisó una caja de fósforos.
Posteriormente la FEMA presentó requerimiento fiscal por el delito de incendio forestal y al realizarse la audiencia inicial se le dictó el auto de formal procesamiento con medidas diferentes a la prisión preventiva.
La Ley Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre, establece una pena de seis (6) a doce (12) años de reclusión por el delito de incendio forestal.