Un estudiante del Centro Básico Monseñor Jacobo Cáceres Ávila resultó con heridas de bala en su cabeza, tras un confuso tiroteo suscitado este lunes en la aldea Nueva Suyapa de la capital.
Información brindada por Wilson Sorto, director de la institución, indica que el alumno solicitó permiso especial para salir de las instalaciones del colegio porque se sentía mal de salud.
Tras confirmarle que podía retirarse, el adolescente que cursa el séptimo grado, se sentó a esperar a sus padres en un muro que está a escasos metros del instituto.
Repentinamente docentes y compañeros oyeron ráfagas de disparos. Al salir del recinto estudiantil se percataron que el menor presentaba heridas de bala en su cabeza.
De inmediato el estudiante fue trasladado al Hospital Escuela Universitario (HEU) para ser intervenido quirúrgicamente. Se conoce que su estado de salud es crítico.
Una de las hipótesis señala que las balas alcanzaron al alumno durante un asalto suscitado enfrente del colegio. Esta versión aún no ha sido confirmada.
El director del Centro Básico Monseñor Jacobo Cáceres Ávila aseguró que no poseen elementos de seguridad en el centro educativo.
'Aquí no tenemos recursos para pagar seguridad. Nadie vio lo que pasó, solo escuchamos los disparos', dijo Wilson Sorto.
De igual manera, una maestra que imparte el pan del saber al menor herido, se mostró consternada y sorprendida por lo ocurrido. 'Aquí cualquier cosa nos puede ocurrir, estamos a la intemperie', manifestó.
Tras el tiroteo, las clases fueron suspendidas de inmediato. Los padres llegaron a recoger a sus hijos, mientras el cuerpo docente se reunió en un salón de clases, para clamar a Dios por la salud del estudiante.
Varios agentes policiales ya resguardan la zona para dar con el paradero de los responsables.