Tegucigalpa, Honduras.- Un joven estudiante que cursaba el segundo año de ciclo común perdió la vida la noche del sábado al colisionar la motocicleta en la que se transportaba con un camioncito.
El accidente se registró en la colonia Brisas de Altamira, a inmediaciones del cementerio Brisas del Cielo en Comayagua, Comayagua.
El fallecido fue identificado como Anderson Josué Espinal Montoya, de tan solo 15 años de edad.
En horas de la tarde del sábado el joven estudiante le dijo al papá que le prestara la motocicleta porque iría con unos compañeros a terminar sus tareas.
El padre del joven, sin imaginarse que iba a ocurrir una tragedia, le dio las llaves del vehículo de dos ruedas, por lo que se fue a un lugar que es relativamente distante de su vivienda.
Cuando regresaba a su casa por la noche, el joven estudiante impactó con el pequeño camión, resultando con lesiones de gravedad. Testigos dijeron que a los pocos minutos falleció.
Miembros del Cuerpo de Bomberos llegaron al lugar del accidente y al hacer las evaluaciones del paciente, confirmaron que había fallecido.
Personal del Ministerio Público y Dirección Policial de Investigaciones (DPI) reconocieron y levantaron el cuerpo del joven estudiante y lo trasladaron a la morgue de Medicina Forense en la capital, donde se le practicó la autopsia.
El cadáver fue ingresado en calidad de desconocido, debido a que no portaba documentos personales ya que era menor de edad.
Fue hasta que llegaron los familiares que presentaron los documentos, y a través de análisis odontológicos, que el joven fallecido fue plenamente identificado por las autoridades.
Los padres, quienes estaban muy consternados, dijeron que Anderson Josué Espinal Montoya era el mayor de los tres hijos que tenían.
“Era un estudiante muy aplicado, muy querido en la colonia y además trabajaba en una ferretería donde era considerado como un buen compañero”, contó el consternado padre.
Comentó que hace algunas semanas su hijo le había dicho que le iba ayudar para emprender un negocio “y que iba a comprar su propia motocicleta”.
“Yo le dije que mejor comprara un carro porque la motocicleta era muy peligrosa por un accidente”, dijo el progenitor.
El cadáver de Espinal Montoya fue entregado la tarde de ayer a los familiares, quienes lo trasladaron a Comayagua para velarlo. Afirmaron que hoy será sepultado.
Agentes de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT), por su parte, iniciaron las investigaciones para determinar quién tuvo la culpa para que se registrara el fatal accidente, que deja luto y dolor en una familia hondureña.