El joven Edwin Alexander García Sánchez, de 22 años, es una de las víctimas halladas sin vida en la intersección del bulevar Fuerzas Armadas y el anillo periférico a la altura de la salida a oriente.
García Sánchez recibía tratamiento en el Hospital Santa Rosita ya que tenía problemas de salud mental. El joven y las otras víctimas crecieron en el sector 5 de la colonia Villa Nueva y vivían en condiciones humildes.
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Edwin Alexander, de 22 años, fue hallado muerto junto a los cuerpos de su primo Carlos Armando López Sánchez (19), Kenia Cálix (30) y una menor de edad, sobrina de Kenia.
La madre había intentado internarlo porque ya la había agredido, pero ella asegura que era por sus problemas mentales, 'yo le tenía paciencia, pues era una persona especial (con capacidades especiales)'.
El joven y su primo se dedicaban a limpiar parabrisas, pues no tenían otra forma de sustento.
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Hasta este mediodía se desconocen el móvil y el paradero de los asesinos que perpetraron el crimen contra estos cuatro hondureños, en plena cuarentena por la pandemia de coronavirus, en la capital hondureña.
