TEGUCIGALPA, HONDURAS.-Una mujer que se grabó quemando a su hijo de 6 años de edad en El Progreso, Yoro, fue dejada en libertad por las autoridades hondureñas.
La fémina fue identificada como Ana Patricia Girón Tábora, quien fue acusada por el delito de maltrato familiar agravado.
“Este caso fue tomado como una denuncia de oficio en el mes de febrero por parte del Ministerio Público, porque el padre del menor también formalizó la denuncia”, informó la portavoz del Ministerio Público, Lorena Cálix.
Según detalló Cálix, el menor, después de quitárselo a la madre, pasó por una casa temporal, pero ya fue entregado de manera oficial al padre.
“Cuando se dio la captura se dio la audiencia de declaración de imputados, en ese momento procesal un juez le dictó detención judicial, no obstante, cuando se da la audiencia inicial, el juez competente resolvió que se dictaran medidas distintas a la prisión preventiva”, informó la portavoz del MP.
La mujer actualmente debe presentarse cada semana a los tribunales, además tiene prohibido acercarse al menor agredido, así como tampoco puede acercarse al lugar donde el menor vive.
Cálix informó que en la próxima audiencia preliminar formalizarán la acusación en su contra.
En caso de que esta mujer sea encontrada culpable, no pasaría más de 6 o 7 años en prisión, detalló la también profesional del derecho.
Horrendo hecho
En redes sociales se viralizó un video (que este rotativo no compartirá por respeto al menor) en el que aparece Ana Patricia Girón Tábora echándole agua caliente en las manos de su hijo.
El clip fue grabado por la misma Ana Patricia para enviárselo a su expareja y padre del menor, con quien estaba en pelea tras su separación, según se ha conocido.
“Sabes qué, Elvin, enseñale los videos a quien vos querás y mandáselos a quien vos querás”, le dice a su expareja, mientras el menor está sentado en la mesa.
“Pero ya te dije, yo veo venir la policía desde largo y esto va a salir peor de lo que crees, mira”, mientras le toma las manos al niño y comienza a dejarle caer agua caliente.
Los gritos del menor son desgarradores y se puede ver su desesperación por salir huyendo del lugar, pero la madre no lo suelta y lo vuelve a colocar en la silla, para seguir echándole agua caliente en las manos.
Tras este abominable acto la mujer fue detenida.