TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Solo cinco días tenía de haber salido de prisión del centro penal Marco Aurelio Soto, en Támara, y fue asesinado la madrugada del sábado en un sector de la capital.
Con una enorme piedra sobre su rostro y parte del pecho fue encontrado el cuerpo sin vida del exagente de la Policía Nacional, Witni Julián Banegas, de 28 años de edad.
El joven fue ultimado a punta de pedradas, a eso de las 3:00 de la mañana, cerca de la segunda entrada de la colonia Kennedy.
Witni Julián Banegas había sido suspendido de la Policía Nacional hace aproximadamente 10 meses, luego que enfrentó un proceso legal en los tribunales de justicia, ya que fue acusado por el delito de robo agravado.
El expolicía fungía como un agente administrativo asignado al departamento de Telemática, en esa institución.
El 25 de febrero del presente año fue detenido por sus propios compañeros debido a que sobre él pendía dicha acusación por el dolo antes descrito.
Fue enviado a prisión y por razones desconocidas fue excarcelado el 24 de diciembre.
Oriundo de La Mosquitia
Witni era originario de La Mosquitia hondureña y tenía unos tres años de vivir en la capital, donde se enroló en las filas de la Policía Nacional. Tenía su domicilio en la colonia Las Palmas de esta ciudad, de donde salió a eso de las 7:00 de la noche del viernes, supuestamente a departir en la zona de la Kennedy.
El cuerpo del expolicía será traslado vía aérea este domingo hasta su lugar de origen.
Por otro lado, la Secretaría de Seguridad argumentó que él fue separado de la institución el pasado mes de marzo y que actualmente su caso se encontraba en proceso de cancelación definitiva.
