Tegucigalpa, Honduras
“¡Quiero a mi hijo, no quiero recordar nada más que a mi hijo!”, decía ahogada por un desgarrador llanto la joven Gladis Migdaly Vásquez. El fuego se llevó lo más hermoso que tenía: su pequeño hijo.
Ella ya no verá más la sonrisa y los vivaces ojos de su pequeño Austin Josué Pérez Vásquez, de apenas 18 meses de edad, quien murió abrasado por las llamas tras incendiarse la casa que habitaba en el sector 1, bloque 8, de la colonia Villa Nueva. La tragedia también conmovió a decenas de vecinos.
El lamentable suceso se registró alrededor de la 1:30 de la tarde en el momento que Gladis Migdaly se encontraba fuera de la vivienda con la señora Miriam Argentina Posadas Velásquez, propietaria del inmueble que alquilaba, mientras que el menor se encontraba encerrado.
De repente, se escucharon los gritos de varios vecinos que decían “doña Miriam, se le está quemando la casita”, por lo que la madre del menor salió corriendo hasta su vivienda, pero ya era demasiado tarde porque las llamas habían cubierto la casa. Elementos del Cuerpo de Bomberos llegaron rápido al lugar donde extinguieron el fuego y evitaron que otras ocho casas resultaran afectadas, según informó el portavoz de la institución, Óscar Triminio. El pequeño cuerpo quedó carbonizado entre los escombros donde fue reconocido por empleados del Ministerio Público junto a equipos de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Llanto y consternación
La escena fue conmovedora. La señora Gladis Migdaly Vásquez lloraba descontrolada por el inesperado deceso de su único hijo Austin Josué. “Quiero a mi hijo, no quiero recordar nada más”, expresaba entre el llanto cuando unas vecinas hacían lo posible por consolarla.
Un oficial del Cuerpo de Bomberos manifestó que “la madre del niño está en una completa crisis histérica, como la llamamos en psiquiatría, está fuera de sí la señora”.
Agregó que la trataron de controlar, “la calmamos porque ella tuvo un gesto suicida”, relató el socorrista.
El dolor por el deceso de Austin Josué no solo lo sintió su progenitora, la señora que le rentaba la casa y algunos familiares también lloraban desconsolados la partida del angelito. “No se imaginan el pesar que tengo por el niño, yo lo quería bastante y él me decía mamá”, expresó doña Miriam Argentina, sin poder contener el llanto.
Expertos del Cuerpo de Bomberos investigan las causas del incendio. Algunos residentes aseguran que escucharon una explosión y luego observaron las llamas.