TEGUCIGALPA, HONDURAS.-Un joven alto y trigueño con muchos sueños por conquistar fue encontrado ayer sin vida en el interior de su vehículo.
Él llevaba cuatro días desaparecido, su familia lo buscaba desesperadamente a través de redes sociales y medios de comunicación.
La búsqueda se había extendido en hospitales, colonias y la morgue judicial, pero no lo encontraron.
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Fue hasta ayer al mediodía que en una calle sin salida de la colonia Loarque, al sur de la capital, los vecinos dieron parte a las autoridades que hace tres días estaba un carro estacionado y de allí salía un fuerte hedor. Inmediatamente se trasladaron al lugar unidades de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y personal de Medicina Forense.
La descripción del vehículo era la misma de los avisos de búsqueda: un turismo color gris con placas PBN 7229, todo indicaba que era él. Llevaba tres días de haber fallecido en el interior del carro y su cuerpo estaba en estado de putrefacción.
Al lugar de los hechos llegaron varios familiares, al verlo y corroborar que sí era él perdieron toda esperanza de encontrarlo con vida y rompieron en llanto.
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Se trata de Luis Gerardo Urbina Zambrano, de 24 años de edad.
El joven estuvo laborando bastante tiempo como chef en un restaurante de comidas rápidas, pero se había retirado del oficio para estudiar una carrera en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Los familiares, muy consternados, aseguraron que no entienden el motivo por el cual le quitaron la vida porque no tenía enemistades y era muy tranquilo. Su sonrisa, su carisma, su espíritu positivo y emprendedor caracterizaban al joven. Le apasionaban los carros modificados y la cocina, según los familiares.
Desaparición
El pasado martes, Luis Urbina estaba en la casa de su abuela en la colonia Torocagua de Comayagüela y a eso de las 3:30 de la tarde salió hacia Roble Oeste, donde reside su mamá.
Los familiares contaron que Luis les dijo que iba a pasar por un supermercado comprando comida, sin embargo, no llegó.
Ellos exigen que se haga justicia y que el crimen no quede en la impunidad.
Misterio
Elementos de la DPI y de Medicina Forense realizaron el peritaje de la escena del crimen.
Un misterio envuelve este caso pues se conoció que el joven murió de un certero disparo en la cabeza hace tres días.
La perforación estaba de adentro hacia afuera, por lo que la persona que le disparó tuvo que haber estado dentro del vehículo. El cuerpo sin vida estaba en el asiento del piloto y la ventana del carro tenía una perforación de bala. Ese sector de la colonia es solitario, por eso los vecinos no se habían percatado de la irregularidad.
EL HERALDO también conoció que en el interior del carro había un revólver calibre 38 por lo que las autoridades no descartan que haya sido él mismo quien se quitó la vida.
No obstante, las puertas del carro estaban cerradas con llave y para hacer el levantamiento del cuerpo tuvieron que romper el vidrio de la ventana.
Horas después, el cadáver fue ingresado a la morgue judicial de la capital y posteriormente entregado a sus familiares.