Tegucigalpa, Honduras
Con moderno equipo tecnológico, las autoridades y estudiantes de la Facultad de Medicina de la máxima casa de estudios prometen aportar logros significativos en el sistema de salud.
Se trata de la implementación de un nuevo sistema de videoconferencia (telemedicina) que será utilizado para conferencias, consultas médicas, congresos y otros, usos académicos.
La iniciativa surgió del galeno Jorge Valle, decano de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
El proyecto tiene como propósito descongestionar, reducir la pérdida de citas y tener mayor control de los pacientes que a diario vistan el Hospital Escuela Universitario (HEU) y otros sanatorios del país.
“La telemedicina existe desde hace varios años, pero en nuestro país como tal no se ha desarrollado. Estoy muy optimista porque los escenarios se han dado para este proyecto y creemos que será de gran ayuda”, explicó el doctor Valle.
Compromiso
El entrevistado comentó que desde que asumió el cargo, el programa de telemedicina ha sido una tarea que se ha propuesto realizar en poco tiempo.
“Con la instalación de este sistema pretendemos que la gente sea mejor atendida, en muchas ocasiones hay pacientes que viajan desde el interior del país para que solo les digan que el médico está de vacaciones, que está en un congreso o que no hay citas”, explicó el especialista.
Con la ayuda del sistema, los hondureños podrán ser atendidos vía videoconferencia solo si el caso amerita será referido a los principales centros hospitalarios.
El galeno comentó que las especialidades de pediatría y ginecología serán la prioridad, ya que tienen un 45% de consultas más que las demás.
En la actualidad existen 10 aparatos de los cuales tres serán instalados en el Distrito Central y uno en San Pedro Sula.
El HEU, la Facultad de Medicina, la Secretaría de Salud y el Hospital Mario Catarino Rivas por ahora serán los lugares en donde funcionarán los sistemas.
Cabe resaltar que cinco dispositivos más vienen en camino producto de la donación de algunas organizaciones y médicos de otros países.
Cada sistema tiene un valor aproximado de más de 72 mil lempiras. Se espera que los artefactos tecnológicos sean manejados por estudiantes y residentes que rotan por algunas especialidades.
Por su parte, Juan Flores, ingeniero de la Facultad de Medicina, explicó que el sistema permite realizar videoconferencias por varias horas sin temor que se vaya a interrumpir. En un futuro, los aparatos podrían ser instalados en las ambulancias.