TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En medio de la tranquilidad de la colonia La Vega, en Tegucigalpa, resonaba la música de una banda que avisa que los desfiles del 15 de septiembre están a la vuelta de la esquina.
Ahí el encargado de poner el ritmo es el Centro Educativo San Juan Bosco, el cual regresa a los desfiles de celebración de la Independencia de Honduras tras una ausencia de cinco años en el gran escenario.
A pesar de tener mucho tiempo sin presentarse ante los capitalinos, un grupo conformado por bellas palillonas y talentosos jóvenes músicos demuestra que el 15 de septiembre Honduras verá un auténtico espectáculo por parte del colegio número 50 en el listado oficial.
El repertorio musical, sincronización, coreografías y pintorescos bailes alegran cada jornada en la institución desde hace un mes y medio.
Detrás de este arduo trabajo está la profesora Lorena Reyes, quien con su energía y liderazgo afina los últimos detalles para que cada pieza tenga un papel importante en la presentación.
“Estamos muy contentos de representar a nuestro centro educativo de la mejor manera, los chicos tienen ya un buen tiempo de estar preparándose, de dar lo mejor de sí para poder presentarse este 15 de septiembre de la mejor manera”, dijo la orgullosa docente.
“Nosotros estamos retomando los desfiles después de la pandemia (de covid-19). Estamos renovando nuestro fervor patrio en este 203 aniversario de Independencia”, agregó Reyes.
El optimismo transmitido por la profesora Lorena Reyes y los demás docentes del centro educativo llega hasta el grupo de estudiantes que con civismo honrará a Honduras en el 203 aniversario de su Independencia.
Talento en la sangre
Si bien el Centro Educativo San Juan Bosco tiene cinco años de no desfilar, al momento de observar sus ensayos parece que los muchachos de la banda y las bellas palillonas llevan muchos años de experiencia.
Sus nostálgicas piezas musicales, sincronizadas coreografías y alegres bailes muestran el compromiso que tienen los jóvenes en dar lo mejor de sí.
A pesar de reconocer que existen nervios previo al gran día, los jóvenes estudiantes disfrutan el momento y comentaron a EL HERALDO que el hecho de bailar y tocar sus instrumentos los hace sentirse motivados.
“Gracias a los entrenamientos duros y fuertes puedo aprender y ahora estamos formando un gran grupo”, dijo Diego, uno de los alumnos que por primera vez tendrá la dicha de desfilar.
“Lo que más me motiva es poder bailar, poder disfrutar y llevarle alegría a las personas para poder entretenerlos”, agrego Sofía, una de las 19 palillonas del instituto.
Esperado regreso
Ubicado como el número 50 en la lista de institutos que desfilarán, el San Juan Bosco trabaja con la garantía de que dará un espectáculo al público.
A pesar del fuerte sol y altas temperaturas sobre la capital, estos jóvenes dan lo mejor de sí. Los alumnos comentaron que lo que más desean es destacar en los desfiles.
Al observar los preparativos su entrega está más que demostrada. Movimientos inesperados, alegres coreografías, cantos y hasta algunas acrobacias son la muestra del arduo trabajo que hay detrás de estos jóvenes.
Con la música corriendo por sus venas, los alumnos del Centro Educativo San Juan Bosco prometen dar un auténtico espectáculo en los desfiles de este 15 de septiembre.