comayagüela, Honduras-. La galera que debería de funcionar como terminal de buses en el mercado Perisur, aún alberga a las 13 familias que fueron desalojadas en agosto pasado de la colonia Godoy.
La esperanza de tener su propia casa elaborada de material de concreto es una luz que se desvanece para estas familias albergadas.
Y es que las promesas de las autoridades de la comuna capitalina de construir sus nuevas viviendas han quedado solo en palabras.
Las húmedas e improvisadas paredes de plywood se han convertido en su hogar por casi nueve meses.
“Decidimos abandonar nuestras viviendas y las protestas en la calle principal de la colonia Godoy porque nos prometieron que nos iban a construir nuestras casas, pero seguimos aquí, esperando”, dijo María del Carmen Valladares, una de las pobladoras desalojadas.
“Nos dijeron que las casas iban a ser de concreto, ahora que ya no, que las van a construir de madera. Para eso se han tardado casi un año, como siempre prometen y nunca cumplen sus promesas”, agregó preocupada.
Las 13 familias fueron desalojadas en agosto de 2018 de la calle que se habían tomado y que da acceso a Lomas de Toncontín, en donde vivieron a la intemperie por más de 9 meses.