TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Con el inicio de la temporada de lluvias, el temor de muchos capitalinos se vuelve latente, sin importar si sus casas se ubican en zonas residenciales o en la periferia.
Y es que factores como las precipitaciones, inestabilidad en el terreno y deficiencias en la construcción dejan como saldo daños en los inmuebles.
Casos
Uno de los casos más recientes se observó en El Sauce, en donde según informes de la comuna capitalina, un muro perimetral colapsó, pues se encontraba sobre un muro de contención.
Sin embargo según una evaluación, se descarta que la residencial se encuentre en una zona de riesgo.
Asimismo, los representantes de la empresa desarrolladora del proyecto habitacional se encuentran en proceso de levantar un informe para presentarlo a la comuna.
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Otro de los sectores de la ciudad es en Laureles del Real, en donde algunos vecinos como Rosa Martínez, adquirieron su casa desde 2011 y comenzó a observar daños en sus paredes, humedad por las lluvias y fisuras.
Con el paso de los años ha tenido que vivir con este problema y se mantiene alerta desde entonces por el reporte de lluvias.
Un grupo de vecinos, incluso interpuso una denuncia ante el Ministerio Público (MP) desde 2015, y siguen a la espera de una respuesta.
Este no es el único caso que se ha presentado al MP, pues hay varios capitalinos que se sienten inconformes con los inmuebles que han adquirido.
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Supervisiones
Julio Avilés, director de Ordenamiento Territorial de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC), explicó que la comuna sí es la encargada de otorgar los permisos para la construcción de proyectos habitacionales, pero estos están condicionados a los estudios privados realizados por arquitectos e ingenieros del proyecto.
Sin embargo cuando se presentan estas fallas la Alcaldía procede a realizar inspecciones, con el fin de que se garantice que la vida de las personas no corre algún tipo de riesgo.
En caso de que sean proyectos habitacionales se trata de llegar a un tipo de conciliación con los encargados del proyecto y si esto no se cumple, el caso llega como última instancia al Juzgado de Policía, no obstante, la mayoría de veces se logra solucionar entre la parte privada y el afectado, aseguró Avilés.
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Por su parte Jorge Medina, de la unidad de Prevención y Mitigación de la Secretaria de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), informó que se deben de realizar los estudios en los proyectos con personas calificadas y seguir la normativa de la construcción, pues la capital es vulnerable ante los deslizamientos de laderas.
Medina detalló que solo en 2020 se realizaron unas 180 evaluaciones en este tipo de terrenos, sobre todo en la capital.
En tanto Arturo Suárez, experto en desarrollo urbanístico, consideró que la comuna capitalina debe ser más estricto a la hora de otorgar permiso a las constructoras y sobre todo dar más atención a la supervisión en campo de las construcciones para evitar este tipo de problemas.
“Las autoridades deberían de solicitar certificaciones del lugar dónde se hará la construcción y supervisar que la obra este acorde con el plan sobre el que se va a construir”, afirmó Suárez.
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